Agentes de la Policía Nacional han detenido a 11 personas en Barcelona y Sant Adrià de Besòs, acusadas de realizar varias estafas con la técnica del vishing, una modalidad de fraude telefónico mediante el que obtenían los datos bancarios de sus víctimas para luego suplantarlas. Se calcula que de este modo habrían robado al menos un millón y medio de euros.
Las investigaciones comenzaron en verano de 2020, después de que varias personas denunciasen en toda España haber sido víctimas de un fraude siguiendo el mismo modus operandi. Alguien llamaba, haciéndose pasar por un operador de telefonía, y ofrecía a la víctima una oferta o rebaja en el precio. Para dar mayor credibilidad al engaño, los estafadores contaban con algunos datos personales de sus interlocutores que podrían haber obtenido de empleados de las compañías que tenían acceso a información confidencial.
Tras ganarse la confianza de las víctimas, los estafadores conseguían sus credenciales de banca on-line y podían cometer los robos. Extraían todo el dinero de las cuentas e incluso daban de alta tarjetas de crédito con las que realizaban compras por internet para maximizar beneficios.
150 PERSONAS ESTAFADAS COMO MÍNIMO
Según ha explicado la Policía Nacional este martes, la mayoría de las víctimas tenían más de 65 años que no estaban acostumbradas a las nuevas tecnologías y eran más susceptibles al engaño. En total, 150 personas fueron estafas por esta banda, como mínimo, a las que robaron hasta un millón y medio de euros. Una cifra que podría aumentar porque los agentes sospechan que hay más víctimas.
Tras meses de pesquisas, los investigadores detectaron que la mayoría de envíos de los productos, adquiridos fraudulentamente por internet, se repartían en la misma zona del área metropolitana de Barcelona. Descubrieron también que utilizaban mulas tanto para recibir los paquetes como para mover el dinero. Finalmente dieron con los cabecillas de la banda, que estaban en contacto permanente con una parte del grupo que operaba desde Perú.
ALTO NIVEL DE VIDA
De las 11 personas arrestadas, ocho han sido detenidas en Barcelona y tres en Sant Adrià. La policía ha registrado además seis domicilios, donde vivían sus máximos responsables, y han intervenido numerosos productos comprados por internet con las tarjetas de créditos a nombre de sus víctimas, entre los que había teléfonos móviles, televisores de alta gama, relojes de lujo, ropa de marca y un coche. También han encontrado 60.000 euros en efectivo. Un altísimo nivel de vida, teniendo en cuenta que ninguno de ellos tenía un trabajo.
OTROS CUATRO DETENIDOS EN MADRID
La operación se ha desarrollado igualmente en Madrid, donde otras cuatro personas han sido arrestadas, elevando el total de detenidos a 15 en toda España. Se los acusa de pertenencia a organización criminal y delitos de estafa. Además, las autoridades esperan que los estafadores ubicados en Perú sean detenidos próximamente.