Un crimen a altas horas de la noche ha hecho saltar todas las alarmas este miércoles de agosto en Barcelona. La ciudad ha amanecido con un presunto caso de violencia vicaria y la huida del supuesto asesino hacia la montaña de Montjuïc. Este martes, 24 de agosto, una madre inmersa en los trámites de divorcio recibió unos mensajes un tanto sospechosos: "Te arrepentirás". Horas más tarde, un niño de dos años perdía la vida presuntamente a manos de su padre, el supuesto criminal y el emisor de estos comentarios.
Ayer, en torno a las 23:00 horas, Martín E.A. habría acabado con la vida de su hijo en la habitación 704 del Hotel Concòrdia de la Ciudad Condal. Todo apunta a que el padre lo retuvo en mitad de un proceso de separación y que finalmente decidió matarlo. Tras los hechos, el hombre, economista de profesión, se fugó. ¿Cómo, cuándo, por qué?
FUGA
Testigos del caso han asegurado a Metrópoli, horas más tarde del crimen, que el presunto asesino escapó por la terraza del complejo, saltando por la valla de la piscina. Después se habría colado de una azotea a la otra hasta llegar al número 10 de la calle Concòrdia, en la misma manzana pero por la parte de atrás del hotel. El dueño de la Bodega Linares, en Concòrdia 6, y algunos de sus clientes, que tomaban algo en la plaza del Setge de 1714, que queda justo enfrente, lo vieron huir por la fachada del edificio, bajando como pudo por una cañería.
Esta tubería desciende por la fachada del número 10 y queda justo al lado del edificio que está en el número 8. El número 10 tiene siete plantas (entresuelo, principal y cinco pisos más); el número 8 tiene seis (entresuelo y cinco pisos). Los testigos que estaban en la plazoleta detallan a este diario que bajó por la cañería hasta la altura del entresuelo, donde el tubo gira y no permite continuar descendiendo. En ese momento cayó al suelo de espaldas, en mita de la calle, y se dio un fuerte golpe. Nervioso, enseguida se levantó.
EL PARRICIDA, EN BUSCA Y CAPTURA
"Pensábamos que era un ladrón", relata a Metrópoli otro vecino que estaba en el lugar. Tras impactar contra el suelo desde una altura de unos tres metros, Martín emprendió su huida corriendo hacia Montjuïc, en dirección opuesta a la avenida del Paral·lel, y los vecinos le perdieron la pista.
Diez horas después del crimen, este miércoles por la mañana, frente al hotel no quedaban ya vehículos policiales, tan solo media docena de periodistas cubriendo el suceso. Un helícoptero de los Mossos d'Esquadra sobrevolaba la zona por la que se fugó Martín, entre la avenida del Paral·lel, calle Concòrdia y las calles que siguen hacia la montaña.
CONDENA DEL CRIMEN
La teniente de alcalde de Feminismos y LGTBI, Laura Pérez, ha condenado el homicidio y ha explicado que desde el ayuntamiento se está dando apoyo psicosocial y acompañamiento a la madre del menor y se sigue el caso de cerca.
A través de las redes sociales, el departamento de Igualdad y Feminismos de la Generalitat ha lamentado el parricidio y ha explicado que está haciendo el seguimiento. "Nos hemos puesto a disposición del ayuntamiento para activar los protocolos adecuados. Pedimos a los medios todo el respeto con el tratamiento de las informaciones. Velamos para garantizar la privacidad de la familia del niño", apunta la consellería.