Los Mossos d'Esquadra creen que Martín Ezequiel Álvarez (44 años), principal investigado por el asesinato de su hijo de dos años el pasado 24 de agosto, se quitó la vida pocas horas después del crimen. Así lo ha expresado este jueves el inspector de la policía, Josep Navarro, que ha dado detalles sobre el hallazgo del cuerpo. 

Agentes de la unidad acuática encontraron el cadáver a las 13.15 horas de este miércoles en una zona boscosa de muy difícil acceso rodeado de cañas y densa vegetación cercana al aeropuerto del Prat. Los investigadores creen que el hombre llegó al lugar donde se halló su cuerpo saltando vallas y apartando arbustos. Sobre el acto de suicidio, Navarro cree que se produjo "la misma noche de los hechos o horas posteriores a la muerte del pequeño". La autopsia determinará el día y la hora exacta del suicidio. La humedad y el calor de la zona donde se encontraba el cuerpo ha dificultado la apreciación exacta de esta circunstancia.

SIETE CASOS DE VIOLENCIA VICARIA

Álvarez mató, presuntamente, a su hijo en el hotel Concordia, en la avenida del Paral·lel de Barcelona con el objetivo de hace daño a su expareja en un nuevo caso de violencia vicaria. El portavoz del cuerpo, el inspector Joan Carles Molinero, ha revelado que desde 2008 los Mossos d'Esquadra han investigado "siete u ocho" casos de violencia vicaria en Cataluña. En el último mensaje enviado a la madre del pequeño, el parricida escribió: "Te dejo en el hotel lo que te mereces".

Los investigadores creen que el hombre no planificó demasiado su huida y que improvisó sobre la marcha. Navarro ha explicado que no intentó contactar con ningún amigo ni familiar y que se ahorcó usando su propio cinturón. En los bolsillos del pantalón no llevaba ningún billete de avión ni dinero en efectivo. Tampoco tenía ninguna nota. Los Mossos han confirmado que no tenía antecedentes

100 AVISTAMIENTOS

Durante las tres semanas de búsqueda los Mossos dieron absoluta prioridad al caso valiéndose de "todos los recursos operativos" de la policía catalana. Participaron agentes de proximidad, Brigada Móvil, ARRO, de la unidad de Subsuelo, marítima, acuática y, sobre todo, de la División Investigación Criminal (DIC). También participaron helicópteros y drones. La policía ha ofrecido protección las 24 horas del día a la madre del niño asesinado.

Un día después del crimen, la policía pidió ayuda a la ciudadanía para encontrar a Álvarez con la difusión de su rostro a través de las redes sociales del cuerpo. El mensaje, que se viralizó en pocos minutos, tuvo una respuesta que se tradujo en un centenar de avisos de personas que afirmaban haberlo visto. Alguien creyó verlo en la carretera haciendo autoestop y un campesino pensó que le estaba robando fruta.

 

Noticias relacionadas