Diez dotaciones de los Mossos d'Esquadra han acudido este lunes a la calle Roger de Flor para desahuciar de su piso a un hombre sin recursos y a su madre, una mujer de 77 años, después de cinco intentos de lanzamiento anteriores parados gracias al apoyo de activistas por la vivienda. El último, hace 15 días.
Fuentes de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) han informado este lunes de que el desahucio se ha materializado tras tirar abajo la puerta de la vivienda por parte de efectivos de la policía catalana. Varias docenas de activistas, sindicatos de Inquilinas y de la Vivienda de Gràcia y vecinos han intentado pararlo sin éxito.
Este hombre y su madre formaban parte, hasta este lunes, de una comunidad de inquilinos que vieron cómo el edificio en el que vivían de alquiler fue comprado por un fondo de inversión en 2017, y que se negó a renovar ningún contrato de alquiler de las 28 viviendas de las que consta el inmueble. Desde entonces se han tenido que ir una veintena de familias, mientras una parte de los vecinos que quedan tienen renta antigua y no pueden ser expulsados.
INFORME DE VULNERABILIDAD
Otras cuatro familias más llevan cuatro años resistiendo en el inmueble, entre ellos los desahuciados este lunes, que tienen un informe de vulnerabilidad elaborado por los servicios sociales y que necesitan un alquiler social. Las mismas fuentes de la PAH han indicado que la familia desahuciada tiene previsto alojarse estos días en la vivienda de unos amigos y que este martes los servicios sociales del Ayuntamiento les recibirán para encontrar una alternativa de vivienda.