La Guardia Urbana de Barcelona ha denunciado penalmente a un conductor que el pasado 12 de junio conducía por la avenida Meridiana de Barcelona a 133 kilómetros por hora en un tramo donde la velocidad está limitada a 50.



El vehículo, que fue captado por un radar, conducía a las 00:24 horas a una velocidad 83 kilómetros por hora superior a la permitida por la arteria norte de la ciudad en sentido al paseo de Fabra i Puig.



La policía municipal de Barcelona ha recordado que la excesiva velocidad en la conducción dificulta el control sobre el vehículo, aumenta la distancia de frenado y también la gravedad de potenciales lesiones

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