Dos ladrones han intentado robar este martes a Leo Higa, el hombre de 42 años que en 2018 se quedó parapléjico a causa de una brutal paliza cuando lo atracaron. Leo se encontraba en la estación de metro de Glòries con su madre, Elena Allende, y su cuidador, cuando uno de los sospechosos se abalanzó sobre la víctima que se desplaza en silla de ruedas. Sobre sus piernas descansaba el bolso de la mujer, que reaccionó rápidamente y evitó el robo.
Un día después de los hechos, Elena explica lo sucedido con rabia e impotencia. "Los ladrones ya no se esconden. No tienen respeto por nada", explica en conversación telefónica con Metrópoli. Los hechos ocurrieron sobre las 12.00 horas en el andén de la estación mientras esperaban el metro.
INTENTO DE AGRESIÓN
Tras el intento fallido de robo, uno de los dos presuntos delincuentes se empezó a burlar ante la amenaza de la mujer que le advertía que llamaría a la policía. Las burlas hicieron estallar a la mujer que empezó a grabar a los dos hombres con su móvil para denunciar lo sucedido. Cuando sacó el teléfono, el más violento le llamó "puta" y le ordenó que dejara de grabar. También intentaba impedir que usara su dispositivo el otro hombre. En el vídeo se observa como el primero intenta golpear a Elena.
La mujer y su hijo volvían de una visita de un médico especialista, una rutina a la que están obligados desde que en febrero de 2018 cinco hombres atacaron a Leo para robarle. Él se defendió y reaccionaron propinándole una paliza salvaje que casi lo mata. El incidente de este martes ha hecho revivir el fatícido día a la mujer, que denuncia la actividad de los ladrones en el metro. "Lo que viví es surrealista. Estas situaciones no se pueden tolerar".
ATAQUE DE ANSIEDAD
Tras los hechos, a Leo le dio un ataque de ansiedad a causa de la "impotencia" que sentía al no poder ayudar a su madre. Con el vídeo, Elena quiere denunciar a estos dos presuntos ladrones y a concienciar a la ciudadanía.