Imagen de un mosso frente a un ordenador

Imagen de un mosso frente a un ordenador Mossos d'Esquadra

Sucesos

Cae una red de pederastas en Barcelona que prostituyó a una veintena de menores

Los Mossos d'Esquadra han detenido a 16 personas y esperan identificar a 14 más

28 junio, 2024 12:01

Los Mossos d'Esquadra han desarticulado una red de pederastas que se dedicaba a captar menores de 16 años por las redes sociales para prostituirlos y producir pornografía infantil. Han detenido a 16 personas, entre las cuales se encuentra el máximo responsable de la trama, y han identificado a 11 víctimas, según ha informado el cuerpo policial a través de Twitter. 

Los hechos ocurrieron principalmente en un domicilio de Barcelona, donde las víctimas mantenían relaciones sexuales, en ocasiones, a cambio de dineros, drogas y objetos de valor. Los investigadores continúan trabajando para identificar 14 autores y 14 víctimas más.

Perfiles de las víctimas

Algunas de las agresiones se registraron con el móvil y cámaras ocultas. En este sentido, al principal investigado también se le relaciona con la grabación de 250 vídeos de agresiones sexuales cometidas por él u otros hombres entre 2016 y 2022 en varias ciudades españolas.

Las víctimas responden a perfiles distintos: desde menores con situación psicosocial vulnerable a otros que tenían entornos más estables En un hilo de conversación entre dos de los investigados se contaron referencias a 79 agresiones sexuales a menores.

Inicio de la investigación

La investigación se inició a finales del 2021, cuando los Mossos d'Esquadra tuvieron conocimiento de la denuncia de una víctima de 12 años que habría sido agredida sexualmente junto a otros menores por un mismo hombre entre mayo del 2020 y en octubre del 2021. 

El autor contactó con las víctimas a través de redes sociales y en algún caso aprovechó las fugas de alguna de ellas de su domicilio para acogerla y perpetrar las agresiones. De esta forma, se arrestó al sospechoso el 9 de junio de 2022 en un domicilio de Ciutat Vella. En el registro de la vivienda se localizó diverso material pornográfico.

El inmueble estaba destinado en parte al alquiler de habitaciones por internet, lo que permitía al sospechoso justificar el tráfico de personas que acudían a su piso y facilitar el acceso a las víctimas.