La Guardia Urbana de Barcelona ha denunciado penalmente a dos conductores que el pasado fin de semana circularon a 118 y 120 km/h por la avenida Meridiana, donde el límite máximo es de 50 km/h.
Los vehículos fueron detectados superando con creces la velocidad permitida en uno de los principales ejes de entrada y salida de la ciudad, con alto volumen de tráfico y presencia constante de peatones.
El cuerpo policial ha comunicado los hechos a través de Instagram, red en la que también ha recordado los riesgos que implica el exceso de velocidad: "Reduce el control, el campo visual y aumenta la gravedad de los siniestros", han señalado.
Captura de pantalla de una historia de la Guardia Urbana
En la misma publicación, la Guardia Urbana ha apelado al "sentido común" y ha instado a respetar los límites de velocidad para garantizar la seguridad vial.
Una conducta reincidente en las calles de Barcelona
Estas actuaciones se enmarcan en un contexto preocupante: en lo que va de año, 59 personas han muerto y 294 han resultado heridas graves en las carreteras catalanas, según los datos oficiales.
Las autoridades alertan de que muchos de estos siniestros podrían evitarse con una conducción más prudente.