El Museu Picasso de Barcelona dedicará una gran exposición en 2018 a la "cocina de Picasso", que ahondará en la faceta más gastronómica del artista malagueño, ha anunciado el director, Emmanuel Guigon.

El director, que tomó posesión del cargo el pasado mes de octubre, ha remarcado que durante "toda su vida, desde el principio en La Coruña y Barcelona hasta el final, el artista ha pintado legumbres y bodegones", además de cocinas -entendidas como salas-.

También ha recordado sobre los bodegones de Picasso que en sus esculturas de ensamblaje -no las de hierro forjado- de la época de la posguerra "casi siempre ponía instrumentos de cocina".

Incluso hay una imagen de Picasso con el fotógrafo Douglas Duncan después de que Picasso inmortalizara la raspa de un lenguado a la meunière en un pedazo de arcilla fresca; el rastro de la comida también aparece en su obra literaria y poética, que "habla solamente de comida", ha agregado.

"Tiene una relación erótica con el hecho de comer. Es una relación muy erótica con la cocina y con los alimentos", ha explicado el director del museo.

A su juicio, "es una metáfora de toda su obra: Picasso come de todo para ser Picasso", ha añadido Guigon, que también incluirá películas y fotografías sobre este asunto en las que aparece el artista George Braque.

Ha avanzado que será una exposición temática y cronológica "con poesía que se podrá escuchar y con palabras en la pared", además de una sala dedicada als Quatre Gats y otra consagrada al restaurante que frecuentó durante la Segunda Guerra Mundial, Le Catalan, donde dibujaba en sus servilletas.

CONGRESO PICASSO E IDENTIDAD

"Mucha gente" participará en esta exposición, que será novedosa a nivel científico, ha celebrado Guigon, que ha sugerido una posible participación en la muestra del chef Ferran Adrià, con el que compartirá cartel en el III Congreso Internacional Picasso e Identidad en abril junto a Brigitte Leal, Jèssica Jaques y Eduard Vallés.

Sobre la nueva etapa que vivirá el museo con Guigon al frente, el nuevo director ha apostado por relanzar dos binomios distintos, pero no de por sí contradictorios, como son el reto de la internacionalización del museo y el de atraer al público local, que supone apenas un 5% del total de visitantes.

BINOMIO INTERNACIONAL Y LOCAL

Respecto a la internacionalización, ha anunciado la próxima firma de un convenio para trabajar en red con los museos Picasso de París, Málaga y de Antibes para potenciar sinergias y colaboraciones en el ámbito de investigación y para el intercambio de información.

Otra de las novedades es la reciente adquisición de la colección de 350 fotografías de Lucien Clergue, conocido por los retratos que tomó de Pablo Picasso, y que podrían verse en el museo en otoño.

MIRADA INTERDISCIPLINAR

La mirada interdisciplinar y académica de Guigon se concretará en una nueva museografía "muy visual y más contextualizada" para la colección permanente del museo barcelonés --centrada en los años de formación académica y primeros años en París del pintor malagueño-- que abrirá puertas en 2018.

Ha celebrado también que en 2018 verá la luz una revista anual de estudios picassianos en diferentes idiomas, que también reforzará la proyección internacional del museo, con el que tiene mucho interés de conectar con el público local y comunitario.

En el museo, que suma cada año un millón de visitas, "hay demasiado público turista", según Guigon, que quiere reforzar el ámbito educativo y pedagógico, y que en verano empezará obras para contar con tres espacios para realizar exposiciones temporales y cambiará los accesos al centro, conservando la entrada por la simbólica calle Montcada.

Su voluntad de hacer "caer los muros" entre las diferentes disciplinas, también se manifestará en una sala gratuita de exposiciones en los bajos del museo, que también podría acoger conciertos, recitales y actos culturales de naturaleza distinta.