El Hospital Universitario Vall d'Hebron es el primer centro en el mundo en usar una técnica mínimamente invasiva para operar la parálisis facial, que consiste en realizar sólo dos pequeñas incisiones, detrás de la oreja y en el interior de la boca del paciente. Un total de 24 pacientes ya se han beneficiado de esta nueva cirugía facial en los últimos cuatro años, ha informado este jueves el Hospital de la Vall d'Hebron.
Se trata de una técnica “muy compleja, de tercer nivel”, que implica hacer un transplante de nervios o de nervios y músculo de la pierna del paciente a la cara, explica el jefe del Servicio de Cirugía Plástica y Quemados de este centro, Joan Pere Barret. La técnica habitual deja una gran cicatriz en la cara, mientras que en Vall d'Hebron han conseguido que sólo se tengan que hacer dos pequeños cortes detrás de la oreja y en el interior de la boca, que quedan escondidos a la vista.
La parálisis facial es una patología que afecta a entre 15 y 45 personas por cada 100.000, y sólo un 30% no consigue una recuperación completa. Este tipo de dolencia pone en peligro la viabilidad del ojo, altera el habla y dificulta la alimentación, y tiene un gran impacto psicológico y emocional en la persona afectada. La causa más frecuente de esta lesión es la denominada parálisis de Bell o parálisis facial a frigore, sin causa conocida.