La Cursa Dir Guàrdia Urbana Diagonal se ha posicionado en seis ediciones como una de las carreras populares más multitudinarias de la ciudad. El atractivo de correr por la arteria más importante de la ciudad, casi de cabo a rabo: la avenida de la Diagonal, y además cuesta abajo, se ha convertido en un reclamo para los runners, veteranos y noveles, que buscan una buena marca en los 10 kilómetros o debutar en una prueba de recorrido poco exigente.
La sexta edición de la carrera se ha corrido esta domingo. Había unos 10.000 atletas inscritos. Poco antes de las ocho de la mañana, la L-3 del metro iba a reventar de gente, como si de un día laborable se tratara. La competición se inicia junto al Palau Reial y finaliza en el paseo de Garcia Farcia, muy cerca del Fòrum. De Les Corts a la playa de Sant Martí en una media hora, los más rápidos, y en algo más de una hora, los más lentos.
Poco antes del inicio, la Diagonal está cortada a la circulación. Sorprendre ver una calle, por lo general, colapsada de lunes a viernes, sin un coche que no entra ni sale de la ciudad por esta vía. Seguramente, esta carrera es una de las que más temprano se corre en Barcelona, y el motivo no es otro que minimizar las afectaciones a la circulación. Por la Diagonal pasan numerosas líneas de autobús. Hasta 47 recorridos se han visto afectados.
COLAU, SIN APARECER
A las 8.30 horas en punto se ha iniciado la prueba. Junto al director general de la cadena de gimnasios DIR, Ramon Canela, estaban en el palco de autoridades el jefe de la Guàrdia Urbana, Evelio Vázquez, y el intendente Carles Reyner. El gobierno municipal estaba representado por la comisionada de Deportes, Marta Carranza. A diferencia de hace un mes, en la Cursa de Bombers, no ha asomado la cabeza por la salida la alcaldesa, Ada Colau. Colau es la máxima responsable de seguridad de la ciudad, pero sus relaciones con el cuerpo de la Guàrdia Urbana son pésimas.
El tiempo para correr es ideal. No hace calor, aunque el viento es desfavorable. La cursa pasa junto a las torres de La Caixa. Algunos corredores voluntarios ejercen de liebres --corren en tiempos concretos para que los atletas que los quieran seguir puedan hacer una marca determinada--. "¡Frena, que vas demasiado rápido!", le suelta una liebre a otra antes del kilómetro 2. Ambos jóvenes, que van a 5'30", no paran de hablar y reír mientras a su alrededor empiezan a asomar los primeros sudores.
Hasta el kilómetro cinco, la cita atlética va cuesta abajo. Allí, a la altura de Marina, concluyen los corredores que hacían la prueba corta. El resto prosigue la carrera por la Diagonal hasta la calle de Castillejos. Durante algo más de un kilómetro, los atletas abandonan la Diagonal por las eternas obras de Glòries. La prueba cruza la Meridiana y prosigue por Bolivia. Este domingo, algunos corredores han descubierto que allí, detrás de la Torre Glòries, está el campamento de chabolas más grande de toda Barcelona y que Metrópoli Abierta ya denunció hace un mes. "¿Has visto? No tenía ni idea de que quedaran barracas en la ciudad", comentan dos corredores.
Los ganadores masculinos de la Cursa Dir Guàrdia Diagonal / CURSA DIR GUÀRDIA URBANA
Antes de llegar a la rambla del Poblenou, en el kilómetro 7, la prueba ya ha retomado la Diagonal. El calor empieza a hacer algo de mella. Aunque es una carrera cuesta abajo, los esfuerzos se pagan, y en este punto de la Diagonal ya se ven atletas que optan por parar y andar un rato. "Venga, ánimo, que ya os queda poco", dice un espectador. "Guapus, guapes. Ho feu molt bé", grita una señora desde un balcón. Cuando este cronista pasa por ese punto, los ganadores ya han llegado. En categoria masculina se ha impuesto el marroquí Otmane Btaimi, con un tiempo de 31'46", y en la femenina, la catalana Laia Andreu, con un registro de 35'58".
El kilómetro 9 está junto al centro Diagonal Mar, casi donde muere la Diagonal, junto al Fòrum. Más adelante, una corredora engaña a su compañera. "Ya queda poco, apenas 500 metros". A su alrededor algunos sonríen. La meta está cerca, pero no tanto. Queda un tramo del paseo de Taulat y de la calle de Josep Pla. Al final, los llegados a meta son 6.627, según detalla el atleta olímpico José Luis Blanco, segundo en la prueba de 5 kilómetros. Siempre hay quien no se presenta o abandona.