Amy Winehouse: La voz que siempre brillará

Siete años se cumplen desde que Amy Winehouse nos dejó, pero su voz nunca se ha apagado y ha seguido obsesinando a generaciones enteras. Los excesos de la fama se llevaron a la joven cantante que desde el 23 de julio del 2011 entró a liderar 'El Club de los 27'. El día que se anunció su muerte, pocos se sorprendieron, era como si de alguna forma todos esperásemos esa lenta y dolorosa muerte, de un alma rota. 

Ella ya lo predijo durante la presentación de su primer disco 'Frank' cuando un periodista le preguntó "cuánto de famosa quería ser" a lo que ella contestó: "Mi música no entra en esa escala. No creo que vaya a ser famosa. No creo, tampoco, poder soportarlo". Con un arte innato que sorprendia por igual estando o no en plenas facultades sobre el escenario, Amy Winehouse era algo más que una voz. Era la viva imagen de una alma frágil llena de sentimientos que al cantarlos, su público podía sentirlo. 

Como había escrito en el tema que titulaba el disco que la consagró, Back to black: "Morí cientos de veces". Ese 23 de julio fue la última y definitiva. Una muerte lenta, solitaria, previsible y precoz.

En cuestión de días, Taschen publicará el libro de sus fotografías más íntimas que muestran tal y como era Amy en su círculo más íntimo. Una joven con una sonrisa arrolladora y una mirada que gritaba todas sus inseguridades.