Desde que anunciaran su regreso después de diez años separados, el grupo de procedencia inglesa que conquistó el corazón de millones de fans de todo el mundo a principios de los 2000, ha demostrado que disfruta con creces de su nueva etapa conjunta y sus proyectos musicales no han hecho más que multiplicarse. Con su más reciente trabajo discográfico, Night Driver (East West Records, 2016), cambiaron totalmente de registro, olvidando su característico pop/rock juvenil para dejar paso a toques electrónicos y al uso de sintetizadores, tan arraigado a la vertiente musical actual. Aunque ya advirtieron que su estilo cambiaría, esto causó cierta división entre los fans que, enamorados de sus clásicos, buscaban recuperar intacto su sonido de antaño y aquellos que abrazaron dicha evolución mostrándose más receptivos.
Sea como fuere, todo apunta a que con el tiempo, los mismos Charlie, Matt y James han experimentado la nostalgia en sus propias carnes, pues según ha confirmado Bourne en repetidas ocasiones a lo largo de los últimos meses a través de su cuenta de Twitter, el que será su cuarto disco de estudio, el cual parece tener muchas posibilidades de publicarse antes de que termine el año, volverá a contar con la importante presencia de guitarras, que en su día fueron su sello de identidad y que tanto añoraron sus seguidores en las últimas canciones que el grupo sacó a la luz.
El proceso de grabación ya ha concluido y mientras se ultiman los detalles finales, no sería de extrañar que estos impredecibles británicos anunciaran de forma inminente el estreno de su próximo single, la fiel continuación de A Present for Everyone (Universal Island, 2003), con el que nos dijeron adiós momentáneamente. ¿Será tan adictivo y genial como prometen? Seguro que no defrauda.
Y, adelantándonos a futuros acontecimientos (no hasta el año 3000, sino quizá al 2019), cruzamos los dedos para que España esté una vez más incluida en su gira europea.