Danny Zuko y Sandy Olsson estarían contentos en nuestra ciudad. Barcelona acogerá el primer autocine de Cataluña y lo hará al más puro estilo Grease. Drive in Barcelona ha impulsado esta iniciativa con una capacidad para 200 coches y un terreno de unos 25.000 metros cuadrados. El proyecto surge justo 36 años después de que –en 1983– cerrara el último de estos espacios en la comunidad autónoma, ubicado en el Prat de Llobregat, tal como han especificado fuentes de la empresa.

Se proyectarán filmes todos los días de la semana por un precio de 10 euros, con una sesión al día en verano y está por concretar si harán una sesión golfa por la noche. En invierno prevén dos sesiones aprovechando la menor cantidad de luz solar. Además, "con el fin de provocar el menor ruido posible", los espectadores podrán escuchar la película a través de una frecuencia de la radio del coche, pudiendo elegir versión original o doblada.

PELÍCULAS PARA TODOS LOS GUSTOS... ¡Y PALADARES!

Habrá tanto estrenos de cartelera como clásicos y colocarán food trucks con comida de distintos estilos y origen. "Queremos conseguir una experiencia que mezcle lo audiovisual con la gastronomía y la bebida”, declaran los impulsores. De este modo, si se trata de una película del Oeste aquel día se acompañará de nachos, tacos e incluso cócteles.

Según ha adelantado el diario Ara, la iniciativa ha sido impulsada por los tres socios de Drive in Barcelona, Martí Morató, Jonathan Álvarez y Jorge Gutiérrez, y están a la espera de un cuarto inversor antes de cerrar una ubicación definitiva.

¿DÓNDE SE UBICARÁ?

La intención es poder abrir entre invierno de 2019 y primavera de 2020 en el área metropolitana de Barcelona. La ubicación todavía se tiene que concretar, pero será en Barcelona, Badalona o el Hospitalet de Llobregat. Las favoritas son el Fòrum de Barcelona o la zona de Bellvitge en el Hospitalet.  

Como decíamos más arriba, se trata del primer autocine de este siglo en Cataluña, pero no el primero de España. A día de hoy se pueden encontrar hasta siete recintos, el último de ellos en estrenarse fue en Madrid en 2017. Los otros se ubican en Gijón (Asturias), dos en Alicante, uno en Valencia, Torrelavega (Cantabria) y Vizcaya (País Vasco).