El sistema catalán de sanidad empieza a saturarse, al menos en lo que a personal se refiere. Hasta tal punto que la Generalitat de Cataluña ha tenido que cerrar los primeros ambulatorios por el número de sanitarios infectados con el Covid-19, o por tener al personal en cuarentena.
La pasada semana, Televisió de Catalunya ya informó de que un consultorio, el Centro de Atención Primaria (CAP) de Santa Coloma de Cervelló, tuvo que echar el cierre porque el personal que lo operaba estaba de baja masivamente tras haber dado positivo por coronavirus.
Este jueves, Crónica Global informa que las clausuras temporales de ambulatorios por el contagio masivo han llegado a L'Hospitalet de Llobregat (Barcelona), la segunda mayor ciudad de Cataluña. El lunes ya no abrió el CAP Santa Eulàlia durante todo el día. Tampoco lo hizo, por la tarde, el CAP Gornal y CAP Santfeliu. Dos días después, el miércoles, continuaban las restricciones en algunos de estos centros.
PLANTILLAS DESBORDADAS
Preguntado sobre el tema, el Instituto Catalán de Sanidad (ICS) no ha respondido a los requerimientos informativos del citado medio catalán. Sí lo han hecho fuentes sindicales, que han señalado que los cierres son debidos a "la falta de plantilla por los contagios con Covid-19".
Por su parte, el sindicato CCOO ha confirmado que le constaban los primeros cierres por desbordamiento de plantilla en centros de atención primaria en Barcelona y el Área Metropolitana (AMB). Y esto se debe bien por contagios de sanitarios o por aislamiento de los profesionales que han tenido contacto con pacientes infectados.
DE DOS A UNA SEMANA
De hecho, la sanidad catalana está tan tensionada que el ICS ha tenido que relajar el protocolo de actuación en caso de contacto entre el personal sanitario y un paciente infectado por el famoso virus. En las primeras ediciones de esta hoja marco, el proveedor público de servicios sanitarios recomendaba para estos casos 14 días de cuarentena.
En la última actualización del domingo, el proveedor público de servicios sanitarios ya rebajaba la cifra a siete días. Según la revisión publicada el miércoles, Salud ya distingue entre contactos "de alto riesgo" y de "bajo riesgo". En el primer caso permitirá a las plantillas continuar en su puesto de trabajo tras tratar un caso de Covid-19.
SI LLEGA A GRANDES HOSPITALES...
Por el momento, la situación aún no es de alerta roja. La pandemia ha diezmado la atención primaria, un nivel asistencial históricamente infrafinanciado por los presupuestos del Departamento catalán de Sanidad.
El nivel de alarma cambiará cuando se vea afectada la operativa de los grandes hospitales del sistema autonómico, en los que están las unidades de cuidados intensivos (UCI) o áreas de vigilancia intensiva (AVI) que permiten una monitorización de los pacientes con infecciones respiratorias provocadas por el Covid-19 y que requieren respiradores y personal que sepa operarlos.
A este respecto, es cierto que hay dispositivos al límite, pero el sistema aguanta. Es en este contexto de provisión urgente de personal donde se enmarcan los esfuerzos de, por ejemplo, el Colegio de Médicos de Barcelona (COMB) para fichar y colegiar a facultativos que no estaban ejerciendo.