Una hembra de oryx (Oryx dammah), una especie de antílope extinto en libertad, ha dado a luz una cría en el Zoo de Barcelona. El nacimiento se ha producido en pleno confinamiento del coronavirus, una pandemia que no altera la vida de los animales del zoológico.
El Oryx, del que hay seis ejemplares en el zoo barcelonés, es un antílope herbívoro de gran tamaño, de carácter temperamental y armado con unos largos cuernos rectos y anillados, de un metro o más de longitud, que contrastan con sus pequeñas orejas.
REINTRODUCCIÓN EN SU HÁBITAT
El nacimiento de esta cría hace aumentar las esperanzas de los biólogos del Zoo de Barcelona de poder algún día iniciar un programa de reintroducción de esta especie en su hábitat, las llanuras del sur del Sáhara, de donde han desaparecido desde hace años.
En febrero, técnicos del Zoo de Barcelona viajaron a Senegal para evaluar la posibilidad de reproducir la reintroducción de esta especie como ya han hecho con la gacela dorca, aunque reconocen que se trata de un plan a largo plazo y mucho más difícil de llevar a cabo.
Los cuidadores del zoológico -cerrado al público por el estado de alarma- aún no saben si es una hembra o un macho porque su madre, "Lluïsa", no deja acercarse a la cría, que se encuentra bien de salud, según ha adelantado El Periódico. Tendrán que ver cómo orina para saber si es hembra o macho, según los veterinarios.
FUNCIONAMIENTO DEL ZOO
Pese a estar cerrado al público, los cuidadores del Zoo se han dividido en tres equipos -dos se relevan y uno está de reserva por si se producen contagios- para acudir diariamente a dar de comer y dar los cuidados higiénicos y veterinarios a todos los animales como si nada sucediese, aunque toman precauciones.
Por ejemplo, los cuidadores de los primates -orangutanes, gorilas, chimpancés y otros monos- utilizan mascarillas protectoras.