Escaparse a un espacio tranquilo para combatir el caluroso verano es siempre una buena opción para los barceloneses. Más allá de las playas de Barcelona, que suelen estar muy concurridas y ocupadas por turistas, la capital catalana está muy bien comunicada con parajes naturales más alejados en los que disfrutar de un buen baño en el mar.
A muchas de ellas es posible llegar en transporte público, con cómodas conexiones desde diversos puntos de la ciudad. B-Magazine ha hecho una lista con las mejores playas del área metropolitana para disfrutar del buen tiempo sin necesidad de desplazarse muy lejos.
LAS TRES PLAYAS DE MONTGAT
Montgat es una de las mejores opciones para darse un refrescante baño porque se puede llegar en tan solo 30 minutos en tren con un billete de transporte de una sola zona desde Barcelona. Este municipio del Maresme, cuenta con dos kilómetros de arena y tres playas. El ambiente es muy familiar y su paseo marítimo tiene un encanto muy especial: atraviesa bonitas zonas ajardinadas y su estampa recuerda a los antiguos pueblos costeros.
Las tres playas son Pla de Montgat, Sant Joan y les Moreres, y podrás visitar la Torre de Ca n'Alzina, una torre de defensa que data del siglo XVI. Además, es una de las costas favoritas por los amantes del surf, el windsurf y el kitesurf, porque las condiciones de viento son idóneas. En la playa de Sant Joan, que se encuentra en el núcleo antiguo, todavía perviven los baños Emporium y los baños del Carme, donde actualmente se sirven deliciosas paellas.
Para llegar sin tener que utilizar el coche se puede ir en Rodalies con el R1 dirección Maçanet-Massanes. En la parada hay que cruzar el paso subterráneo para acceder a ella. Se tarda entre 30 y 35 minutos saliendo desde plaza Catalunya o Clot.
CASTELLDEFELS
La playa de Castelldefels también se compone de tres playas que tienen una extensión de casi cinco kilómetros. Por ello, el espacio no es un problema en una de las mejores playas del Área Metropolitana de Barcelona. Si algo define a sus parajes naturales es su arena, que, a diferencia de las playas barcelonesas, es fina.
Además, para los amantes de los chiringuitos, Castelldefels está repleto de paradas para refrescarse o disfrutar de una deliciosa comida frente al mar. Además, hay un Club Náutico y un Club Marítimo.
Se puede llegar a ellas con el R2 Sud dirección Vilanova i la Geltrú. Hay que bajarse en la estación Castelldefels Platja. ¡Cuidado, porque no todos los convoyes de esta línea pasan por esta parada! Hay que cerciorarse bien antes. Tan solo se tarda 35 minutos desde paseo de Gràcia y también hace parada en la estación de Sants.
EL PRAT
La playa del Prat se encuentra entre la desembocadura del río y el aeropuerto. A pesar de que es una de las localidades costeras a la que es más difícil llegar con transporte público desde Barcelona, su paisaje vale la pena.
Es una playa muy amplia y muy cerca están los espacios naturales del Delta del Llobregat. Además, se pueden observar los aviones que sobrevuelan la zona muy a menudo. El extenso litoral cuenta con todo tipo de instalaciones y chiringuitos para refrescarse con un cocktail o comer con increíbles vistas.
No hay opciones directas ni en metro ni en Rodalies, así que quien quiera ir tendrá que optar por combinar el trayecto con tramos de autobús y armarse de paciencia puesto que tardará más de una hora.
GAVÀ
Gavà tiene dos playas que se sitúan a unos cuatro kilómetros del núcleo urbano. Es considerado un espacio de ocio permanente que ofrece todo tipo de servicios en la zona costera.
Además, cuenta con un pinar litoral que aumenta el valor paisajístico del conjunto. Frente al paseo se encuentran restaurantes, hoteles de lujo y campings, aunque también es una playa ideal para pasar el día.
Igual que en la playa del Prat, no hay opciones directas para acceder en tren, por lo que la opción más recomendada es coger un bus desde Plaza España.
VILADECANS
Las playas de Viladecans, muy cercanas a las del Prat i Gavà, se extienden desde la desembocadura de la laguna del Remolar hasta la laguna de La Murtra. Por ello, cuentan con un extenso pinar litoral en sus 2.480 metros de extensión.
Son unas playas sin urbanizar que conserva comunidades vegetales y animales propios de los arenales costeros. Si visitas esta playa, no puedes olvidarte de dar un paseo para llegar al mirador que hay entre las playas del Remolar y Cal Francès para disfrutar de las vistas.
Actualmente, la playa de El Remolar está cerrada al baño por nidificación de aves protegidas. Como en el caso de sus playas vecinas, se necesita combinar el trayecto con tramos de autobús si se desea llegar en tren.
Playa de Viladecans / AJUNTAMENT DE VILADECANS
BADALONA
A menos de 20 minutos en tren desde la estación de Clot o Plaza Cataluña, la playa de Badalona guarda más intimidad que la playa de Barcelona aunque también es bastante visitada.
El municipio cuenta con tres playas que merecen la pena: el Gorg, el Manresà y la Platja del Centre. Entre semana son espacios muy tranquilos y en todas ellas encontraras chiringuitos en los que poder tomar algo después de una larga jornada de sol.
También se puede acceder a esta playa en metro con la línea 2 hasta la parada Badalona-Pompeu Fabra.
EL MASNOU Y OCATA
Las playas de El Masnou y Ocata son "dos tesoros" del Maresme. Aunque el trayecto en tren es un poco más largo que hasta las playas de Badalona o Montgat, su encanto hace que valga la pena.
Tienen una esencia familiar y acogedora que las hace únicas, por lo que es una de las playas preferidas por los barceloneses.
Además, la parada de tren queda justo en frente de la arena, por lo que los visitantes no deberán caminar demasiado para llegar a su costa.