Los amantes de la astronomía tienen el mes de noviembre marcado en rojo en el calendario. El motivo, el afán por ver las Leónidas, la lluvia de estrellas más popular tras las conocidísimas Lágrimas de San Lorenzo y las Perseidas. En 2021, este espectáculo de la naturaleza tiene lugar entre los días 6 y 30 de noviembre.
Según los expertos, las Leónidas pueden observarse cualquiera de estos días, aunque el momento álgido se dará durante la noche del 17 al 18 de noviembre, entre las 4:00h y las 6:00h de la madrugada, justo cuando la Luna comience a ponerse tras el horizonte. Será entonces cuando sea más fácil observar la veintena de meteoros por hora que impactan sobre la superficie de la atmósfera.
Y es que las Leónidas, perceptibles a simple vista, son los fragmentos del cometa 55P/Temple-Tuttle cuando la Tierra transita cerca de su órbita. El periodo orbital de este astro es de 33,2 años, por lo que cada vez que transcurre este tiempo se puede observar una gran lluvia de estrellas desde nuestro planeta. En lugar de los 20 meteoros por hora que se ven estos días, la cifra alcanza el millor. Algo que no volverá a ocurrir hasta 2031.
OTRAS LLUVIAS DE ESTRELLAS
Aunque esta no será la única lluvia de estrellas de noviembre. Durante este mes coincinden otras tres: las Táuridas del Norte –entre el 20 de octubre y el 10 de diciembre, con un pico el 12 de noviembre–, las Alfa Monocerótidas –entre el 15 y el 25 de noviembre, con una mayor visibilidad el día 21– y las Oriónidas –del 13 de noviembre al 6 de diciembre, con el máximo el día 28–.
¿SE VERÁN DESDE BARCELONA?
El disco lunar –con una luna casi Llena, del 98% el 17 de noviembre– y la contaminación lumínica harán difícil que las Leónidas sean visibles desde la misma ciudad de Barcelona.
Por este motivo, los expertos señalan que los lugares óptimos para observar la lluvia de estrellas son siempre aquellos que tienen un cielo oscuro, lejos de las grandes urbes, sin grandes focos de luz en las inmediaciones y mirando en dirección opuesta a la Luna. Es recomendable también acudir a sitios con pocos obstáculos para el campo visual, como edificios o montañas.