Este es el barrio más barato para comprar una vivienda en Barcelona

Barcelona se sitúa entre las ciudades más caras de España para vivir. Los precios siguen sin frenarse y continúan en máximos históricos. Sin ir más lejos el precio medio de alquiler en la capital catalana alcanzó en el tercer trimestre de 2022 los 19,4 euros el metro cuadrado al mes. Una cifra muy por encima de la media estatal que se sitúa en los 11 euros el metro cuadrado al mes.

Según el portal de datos Brains Real Estate, el precio medio del alquiler se sitúa en 1.685 euros al mes. Lo cierto es que sólo hay dos distritos en la capital catalana que se encuentren por debajo de los 2.000 euros el metro cuadrado: Nou Barris y Sant Andreu. 

NOU BARRIS 

Ciutat Meridiana, perteneciente a Nou Barris, es el barrio más económico de Barcelona donde adquirir una vivienda. Comprar una vivienda en este barrio cuesta, de media 1.605 euros por metro cuadrado, precio que ha retrocedido un 3,4% en los últimos doce meses, mientras que trimestralmente se ha recuperado un 0,2%. El barrio de Torre Baró,  también en Nou Barris, es el segundo barrio de Barcelona donde se encuentran las viviendas en venta con los precios más económicos. Concretamente, el precio medio de las viviendas en Torre Baró, es de 1.671 euros por metro cuadrado, lo que supone que se mantiene con respecto al mismo periodo del año anterior.  

En el barrio de Vallbona, perteneciente también al distrito de Nou Barris, el precio medio de las viviendas es de 1.702 euros el metro cuadrado. Les Roquetes es el cuarto barrio de la ciudad donde se puede adquirir una vivienda más económica por 1.915 euros el metro cuadrado. Se trata de viviendas de segunda mano porque el parque de viviendas del barrio se levantó principalmente entre los años 1964 y 1976, por lo que actualmente las promociones de obra nueva son prácticamente inexistentes.

SANT ANDREU 

En el barrio de Baró de Viver, en el distrito de Sant Andreu, se puede adquirir una vivienda por 1.938 euros el metro cuadrado; precio que se ha resentido en el último trimestre con un descenso del 4,5% y que hace alusión a la vivienda usada, ya que en los últimos años apenas se han construido nuevos residenciales en la zona.