El mes de octubre ha empezado más cálido de lo habitual. Las temperaturas máximas se sitúan en los 28 grados, dejando un septiembre extraordinariamente caluroso. Estos valores no sólo se dan en el aire, sino que también el agua del mar está especialmente caliente. En el caso de Barcelona, el agua del Mediterráneo empieza octubre con una temperatura similar a julio: 25 grados.
Debido a la situación de las últimas semanas de sequía, junto con un mar encalmado y un régimen de vientos flojos de sur y garbí, han comportado que el agua del mar en la capital catalana haya vuelto a ascender. El Mediterráneo marca todavía valores muy cercanos a los 25 grados y todo apunta a que esta calidez se seguirá arrastrando hasta mediados de octubre.
El jueves, 28 de septiembre, el agua del mar de Barcelona se situaba en los 24 grados, una temperatura muy propia de mediados de julio, cuando la media de los últimos 18 años se sitúa en 24,5 grados, según los datos del Diego Lázaro, que mide la temperatura del agua del mar semanalmente desde el 2006.