A las puertas del puente de diciembre, Barcelona se prepara para vivir una de las semanas más frías del invierno. La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha lanzado una alerta amarilla por mal tiempo de cara a los próximos cinco días, que estarán marcados por el frío polar y las precipitaciones.
DESCENSO DE LAS TEMPERATURAS
La AEMET ha anunciado que a partir de este miércoles, 6 de diciembre, se registrará un descenso importante de las temperaturas, con mínimas que alcanzarán los seis grados. La jornada festiva, además, vendrá acompañada por fuertes vientos que harán que la sensación térmica sea menor.
Esta situación empeorará a partir del jueves, 7 de diciembre, que estará marcado por rachas de aire de más de 15 kilómetros por hora. A este fenómeno meteorológico se le sumarán las lluvias y un nuevo descenso de las temperaturas.
RACHAS DE VIENTO
El viernes, 8 de diciembre, los termómetros marcarán más grados que los días anteriores, con mínimas de 15 y máximas de 18 grados. Del mismo modo que el jueves, las precipitaciones serán las protagonistas de la jornada, que no darán tregua. A todo esto, hay que sumarle vientos de 25 kilómetros por hora, que harán bajar aún más la sensación térmica.
El fin de semana desaparecerán las lluvias en Barcelona y su área metropolitana, pero el frío polar seguirá azotando la capital catalana, así como las rachas de viento de más de 30 kilómetros por hora. Las precipitaciones de estos días –a pesar de que no serán muy abundantes– darán una pequeña tregua a la sequía, ya que la ciudad se encuentra en fase de premergencia por falta de agua.