Navidad es sinónimo de nieve. Aunque no estamos acostumbrados a ver Barcelona teñida de blanco, hace más de 60 años la ciudad quedó totalmente paralizada por una gran nevada. En 1962 unos 50 centímetros de nieve cubrieron las principales calles y zonas emblemáticas de la capital catalana.
En las siguientes imágenes, difundidas en X por la cuenta @BoigBCN y que en su día compartió Renfe, se observa cómo las principales calles y zonas emblemáticas se se tiñeron totalmente de blanco:
CIUDAD PARALIZADA
Barcelona nunca había vivido un episodio similar, por lo que la ciudad se paralizó por completo. De hecho, el Aeropuerto de El Prat estuvo cerrado cuatro días con 60 centímetros de nieve.
Los medios de transporte apenas podían circular y la recogida de basuras se realizaba con carros tirados por caballerías hasta que se normalizó la situación.
AYUDA DE ANDORRA
En 1962 no había máquinas quitanieves en Barcelona. Por ello, el alcalde franquista José María Porcioles, que gobernaba la ciudad en aquel entonces, recurrió a un amigo suyo de Andorra para que entrasen máquinas en la capital catalana.
Imágenes de la 'Gran Nevada' de 1962 en Barcelona
Sin duda, esta fue la Navidad más blanca que la ciudad ha vivido en mucho tiempo, y la nieve estuvo presente durante días, con temperaturas que oscilaban entre los 0,6 y 2,1 grados bajo cero, unos valores muy diferentes a los actuales.