Barcelona ha estrenado los nuevos semáforos regulados por los personajes de Mortadelo y Filemón. Un homenaje a su creador Francisco Ibáñez que parece haber pasado desapercibido para los barceloneses. “Paso por aquí todos los días y no me había dado cuenta”, destacan sorprendidos varios transeúntes mientras cruzan el paso de cebra de la ronda de Sant Pere con paseo de Gràcia.

El motivo de esta iniciativa, también lo desconocen. Saben, en cambio, que Ibáñez nació en Barcelona, con lo que intuyen que se trata de un homenaje: “Me parece una idea muy simpática”, expresa un hombre que segundos antes estaba tomando unas fotos al semáforo. “Soy fan de Mortadelo y Filemón, me he leído casi todos sus cómics y estoy esperando al que sale en abril”, explica a Metrópoli. Es de Sant Celoni, pero viene a la capital catalana cada semana. Ignora, en cambio, los motivos de este curioso hecho.

Semáforos regulados por Mortadelo y Filemón, un homenaje que pasa desapercibido en Barcelona

“El Ayuntamiento de Barcelona debería haberlo anunciado más”, comenta otro barcelonés a este medio, que también desconocía la iniciativa: “Si no es porque me lo dices tú, no me doy ni cuenta”. Pese a que a la gran mayoría les parece una idea original a la que ven con buenos ojos, otras personas creen que otro tipo de homenaje pasaría menos desapercibido. “Hubiese sido mejor organizar una exposición, dedicarle una calle o hacerle una escultura”, señala una mujer, que cree que el consistorio “busca innovar pero sin una finalidad concreta”.

La gente más joven, en cambio, lo ve bien. “Creo que a Francisco Ibáñez le gustaría porque es un homenaje muy artístico”, comenta una universitaria. “A mucha gente le debe hacer gracia, que supongo que es lo que su autor hubiese querido”, señala otro chico, que recuerda haber visto algún cómic de Ibáñez en casa de sus padres cuando era un niño: “Alguna vez los había ojeado”.

ORIGEN DEL HOMENAJE

Estos semáforos, únicos en el mundo, surgen de la propuesta de un profesor de Navarra tras el fallecimiento de Francisco Ibáñez en julio del año pasado. El maestro lanzó en redes la idea de rendirle este original homenaje en las calles de su ciudad natal, con un diseño hecho por él mismo. Su rápida viralización y el gran apoyo que recibió por parte de los barceloneses hizo posible que esta petición sea, a día de hoy, una realidad. Cada semáforo muestra la figura del personaje de Filemón en rojo y la de Mortadelo en verde.

La instalación de los semáforos quiere ser un reconocimiento más a Francisco Ibáñez y a su obra, después de que el 4 de octubre de 2023 se entregara al dibujante la Medalla de Oro al Mérito Cultural a título póstumo.

DISTINTAS UBICACIONES

El primero de los cuatro semáforos que regulan estos personajes está en el cruce de la calle Treball con Concili de Trento, en el distrito de Sant Martí, donde vivió Ibáñez. Los demás se encuentran en el cruce de Gran Via con la calle Bac de Roda –un punto próximo al lugar donde residía el dibujante–, entre Comte d’Urgell con la calle Manso –por la proximidad con el Mercado del Libro Dominical de Sant Antoni–, y en el cruce de la ronda de Sant Pere con paseo de Gràcia.

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