Barcelona enfrenta un fin de semana de Carnaval pasado por agua. La capital catalana recibirá a Karlotta, nombre con el que se ha bautizado a la borrasca que sucederá al anticiclón posado actualmente sobre la ciudad.
La urbe pasará, a partir del jueves, a temperaturas más invernales frente al tiempo primaveral de las últimas semanas, un tiempo que traerá consigo varios episodios de lluvia. Los termómetros, por otro lado, bajarán a mínimas de unos 7ºC y máximas de unos 16ºC.
LLUVIAS POCO INTENSAS
Se trata, no obstante, de una lluvia molesta, que tampoco llega para solucionar la situación de sequía que sufre el Principado. Los chubascos llegarán el viernes y el sábado, justo los días en los que hay más rúas por el Carnaval.
No obstante, no tendrá una intensidad suficiente como para mitigar la falta de agua que arrastra la ciudad desde hace meses.
Como es habitual, la borrasca vendrá acompañada de fuertes episodios de viento, que puede llegar a superar los 80 km/h en algunas zonas, si bien no debería llegar con tanta intensidad a las zonas urbanas del Área Metropolitana.