El Área Metropolitana de Barcelona sigue ampliando las medidas para hacer frente a los efectos de la grave sequía, después de que la Agencia Catalana del Agua (ACA) declarara el estado de emergencia.
Una de las medidas anunciadas hace unas semanas es la bajada de la presión en el suministro en los municipios que tienen la mayor dotación. Este miércoles, 28 de febrero, el AMB ha informado que a partir del 11 de marzo se empezará a reducir la presión del agua en los municipios de Begues, Cervelló, Corbera de Llobregat, Palma de Cervelló, Sant Just Desvern, Sant Vicenç dels Horts y Tiana.
Más municipios afectados
El objetivo es bajar la dotación al máximo con la finalidad de alargar los recursos en la medida de lo posible por si la situación no mejora a medio plazo. La presión del agua está ya ajustada en el área metropolitana a los límites más bajos que permite el reglamento del servicio metropolitano del ciclo integral del agua.
En caso de continuar la situación actual de sequía, se prevé extender paulatinamente las medidas de reducción de presión en otros municipios, priorizando los que tienen las dotaciones más elevadas. La evolución de los próximos meses permitirá decidir a los municipios afectados.
Regeneración del agua
En el contexto de la sequía más larga y severa en el territorio metropolitano desde que existen registros, el AMB aplica desde hace meses medidas para aumentar la cantidad de recursos disponibles. La estrategia principal es la producción de agua regenerada en la estación de regeneración de aguas del Baix Llobregat. Actualmente, el 25% del agua que consumen los 3,3 millones de habitantes del área metropolitana de Barcelona proviene de la regeneración. Sumada al 33% procedente de la desalinización, representa que un 58% del agua que se consume proviene de recursos alternativos, que no dependen de los embalses ni de la meteorología.
Gracias a estas estrategias, se ha logrado retrasar el estado de emergencia y la aplicación de medidas más duras, como las restricciones de suministro a gran escala.