Los fines de semana es común que los barceloneses se suban al coche o al transporte público en busca de excursiones. Salir de la ciudad y las prisas o el ruido es una opción muy bien valorada. Los que busquen nuevas rutas por explorar, deben saber que, a menos de dos horas de Barcelona, existe una que tiene de las mejores vistas del país.

Se trata de un trayecto que incorpora no solo varios miradores de ensueño, sino también cascadas y uno de los pueblos medievales más bonitos de Catalunya. En efecto, se trata de la ruta del Salt de Sallent, que empieza y acaba en Rupit. Durante la excursión se puede encontrar el salto de agua más alto de toda la comunidad.

El Salt de Sallent EXPERIÈNCIA RURAL

¿Cómo llegar?

Se puede llegar fácilmente desde el pueblo de Rupit, famoso por sus casas colgantes, que conserva todo su encanto medieval. Curiosamente, a pesar de tratarse de uno de los pueblos más famosos de Catalunya, solo cuenta con 285 habitantes.

Desde este pueblo surge un sendero de fácil acceso, que pueden hacer todos los integrantes de la familia. También, para aquellos que no tengan miedo a las alturas, pueden dirigir sus pasos hasta el mirador de Salt de Rupit.

El pueblo de Rupit de la provincia de Barcelona en una imagen de archivo

A lo largo de la caminata, encontrarás varios lugares donde descansar, remojar tus pies en el agua, disfrutar de varias cascadas o sentarte a la sombra de árbol para disfrutar de la brisa.

Rupit i Pruit

Y, para el inicio y el final de la jornada, puedes hacer parada en Rupit, un pueblo en el que disfrutar de un buen menú de la mejor gastronomía del interior de Catalunya, rica en carnes, verduras y embutidos de calidad.

También puedes pasear por sus calles empedradas, sus casas rústicas de los siglos XVI y XVII y su peculiar puente colgante de madera. Y, si todavía te sobra tiempo, puedes planear tu siguiente ruta, pues hay una amplia variedad de caminos por recorrer que salen de este enclave.