Barcelona lucha, día sí y día también, por y contra el cambio. La capital catalana se encuentra en constante modernización y actualización. No obstante, todavía hay rincones por mantener esa esencia de lo que una vez fue. Pequeños rincones en los que parece que el tiempo no pasa y se mantiene fiel, en precios, ambiente y productos, a lo que había hace décadas.

Existe, concretamente, un bar en Sant Antoni con 60 años de historia en el que el tiempo se mantiene hierático, paralizado en la década de los 60, sirviendo la misma comida casera y dando esa atención de proximidad, tan característica de los bares de toda la vida. Se trata del bar Amadeo, un local fundado en 1967 y que todavía mantiene la esencia del local fundacional.

Una pausa en el tiempo

Ubicado en el número 13 de la calle de Entença, David y Montse, los propietarios, mantienen vivo el espíritu del bar, a la vez que sirven sus tradicionales tapas catalanas y españolas.

También sirven ensaladas, platos combinados y, en definitiva, todo lo que se puede esperar de un bar de los de siempre. Según el periodista Marc Piquer, gestor de la cuenta Barcelona Singular en Twitter, que se encuentre en Sant Antoni tiene un valor añadido, pues es todavía es uno de esos locales que resiste a la gentrificación del barrio.