El precio del alquiler de la vivienda puede bajar exponencialmente si uno decide alejarse de Barcelona. A la hora de buscar zonas para el nuevo hogar, una buena forma de hacerlo es siguiendo las líneas de Rodalies.
Esa es la conclusión que se extrae del último informe inmobiliario elaborado por el portal Fotocasa. "Es evidente que cuando nos alejamos del centro de Barcelona, el precio disminuye significativamente", ha valorado María Matos, la directora del estudio.
Y es que, usando como referencia un piso de 80 metros cuadrados, el precio del alquiler en los alrededores de la plaza de Catalunya puede llegar a los 2.400 euros mensuales, a razón de 31,03 euros por metro. No obstante, a unos 30 minutos de la capital catalana, el precio puede menguar por encima de un 64%.
La primera corona
Así, en los alrededores de estaciones como Ocata, Badalona o Castelldefels, que se encuentran a menos de media hora del centro de la ciudad, el precio se ubica entre los 14 y los 15 euros por metro cuadrado o, lo que es lo mismo, entre los 1.125 y 1.200 euros por un piso de 80 metros cuadrados. El primer gran bajón llega en Cerdanyola, en la frontera entre la primera y la segunda corona. Con 11,14 euros por metro cuadrado, el precio desciende a los 890 euros al mes.
Las cifras no engañan. A pocos minutos de la capital, en la primera corona, los precios siguen siendo caros. No obstante, el principio está claro: siguiendo las líneas de Rodalies, cuanto más lejos, más barato el precio.
La plataforma inmobiliaria señala que eso puede ser una buena oportunidad para los inquilinos pues, gracias a la gratuidad del transporte, solo se requiere de una inversión en tiempo para trasladarse de casa al trabajo.