La calle de Barcelona que traslada al S.XIX: Casas de Colores y estilo modernista

Entre la calle d'Andrade y la del Concilio de Trento, se abre un pequeño pasaje que conecta la calle Espronceda con la de Bac de Roda, el barrio del Clot con el de Sant Martí de Provençals. Más que un tramo de conexión es un pintoresco túnel en el tiempo que, en apenas 122 metros, transporta al transeúnte a la Catalunya obrera de los siglos XVIII y XIX. En estos 122 metros se alinean a derecha e izquierda un conjunto de casas al estilo de las viviendas de la Catalunya masovera e industrial de los siglos XVIII y XIX. Se trata del Passatge d'Antoni Gassol. 

Excepto los primeros metros de la entrada por Espronceda, a lo largo de todo el pasaje, se alinean, a ambos lados, una veintena de casitas de planta baja y azotea. Las fachadas, pintadas actualmente de colores claros(verde, blanco, rosa, beige, gris...), están dominadas por una puerta central, en algunos casos de madera y con llamador, flanqueada por dos ventanales protegidos por rejas forjadas. Algunas conservan aún las modestas decoraciones modernistas en su versión más popular y modesta, con motivos florales o detalles de cerámica vidriada. Todas las viviendas disponen, además, de un patio trasero, visible desde la calle Concilio de Trento.

Levantado entre 1911 y 1929 por el arquitecto Manuel Puig Janer, este conjunto de casas formaba parte de la heredad Manso Serra y es lo que queda de las modestas viviendas destinadas a los trabajadores de las fábricas de Antoni Gassol i Civit, propietario de los terrenos desde 1918. Este industrial textil hizo fortuna en Cuba con su almacén de productos textiles Los Encantos de La Habana y regresó a finales del siglo XIX a Barcelona, donde se convirtió a principios de la década de 1920 en una de las figuras más importantes de la industria textil.

Esta pequeña reliquia del pasado se recuperó para el barrio gracias a una reforma llevada a cabo en 2021. Desde entonces, convertido en vía peatonal, este encantador pasaje declarado conjunto histórico protegido, se ha convertido en un pequeño oasis de calma que guarda en su interior un pedacito del pasado de este barrio.