El Meteocat avisa: alerta naranja por fuertes lluvias y tormentas en Barcelona

El Servei Meteorològic de Catalunya (Meteocat) ha emitido una alerta por fuertes lluvias y tormentas en Barcelona esta semana. Protecció Civil de la Generalitat ha activado el Plan especial de emergencias por inundaciones (Inuncat) por la previsión de lluvias para este lunes y martes en las comarcas barcelonesas.

Según ha informado en un comunicado en 'X', se pueden acumular más de 100 litros por metro cuadrado en 24 horas en las comarcas del Garraf y el Baix Llobregat.

Las temperaturas caerán en picado

"La precipitación sigue en gran parte del territorio, viajando de sur a norte. La lluvia es débil por lo general, o localmente moderada, pero será más intensa durante la tarde", dice el Servei Metrotològic de Catalunya (Meteocat), que ha alertado de una bajada en picado de las temperaturas este martes.

Vuelven los chubascos a la capital catalana EFE

Además, también ha anunciado que para los próximos días se prevén precipitaciones generalizadas, con aguaceros a lo largo del día. Además, el miércoles por la tarde habrá chubascos y tormentas. El viento también será el protagonista esta semana y se prevén rachas que podrían superar los 20 kilómetros por hora.

Grado de peligro de tres sobre seis

Si hasta hace escasas horas el grado de peligro era de uno sobre seis, ahora ha subido hasta los tres puntos. Por esta razón, la Generalitat ha pedido extremar la prudencia en la movilidad en las zonas donde llueva de forma intensa, así como alejarse de rieras y zonas que puedan sufrir inundaciones. 

La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) también ha emitido un aviso por la situación climatológica en el litoral barcelonés. La precipitación acumulada durante esta jornada podría superar los 80 mililitros de agua por metro cuadrado y también podría caer granizo.

Una tregua a la sequía

Estas previsiones meteorológicas darán una pequeña tregua a la situación de emergencia por la sequía que se vive en Barcelona y su área metropolitana, ya que la falta de precipitaciones ha obligado a varios municipios a tomar medidas para reducir el consumo de agua.