Las bodegas de Gaudí con espectaculares vistas y una capilla abierta al mar: a menos de una hora de Barcelona

El trabajo de Gaudí se puede encontrar repartido por todo el territorio catalán. Ubicadas en el pintoresco entorno del Garraf, estas bodegas del artista emergen como una joya arquitectónica con un encanto sin igual. Con vistas espectaculares al mar Mediterráneo, esta bodega combina historia, arte y naturaleza en un sólo lugar.

Lo que hace que las Bodegas Güell sean aún más especiales es su capilla única, que se abre hacia el mar, ofreciendo un escenario incomparable para la reflexión y la contemplación. La obra del arquitecto está hecha de piedra caliza extraída de la misma zona donde está erigida.

Historia

Como bien señala su nombre, esta construcción alberga bodegas en las que antiguamente se elaboraban vinos que se exportaban a Cuba. La construcción fue encargada por Eusebi Güell, mecena de Gaudí, entre 1895 y 1901. Su amistad permitió también construir el palacio Güell, los pabellones Güell de Pedralbes, el parque Güell y la cripta de la Colonia Güell en Santa Coloma de Cervelló. Eusebi Güell adquirió en 1874 unos terrenos de 825 hectáreas en el Garraf, entre Sitges y Castelldefels. 

MARCELO RIOS

Eventos privados

Actualmente esta bodega alberga un restaurante. Sin embargo, su acceso no es libre para el público en general. Para disfrutar de esta experiencia única, los interesados deben reservar su visita con anticipación, ya que la bodega sólo abre sus puertas para eventos especiales.

MARCELO RIOS

Cómo llegar

No es difícil llegar hasta las Bodegas Güell. Se puede ir en tren desde Barcelona con la línea R2S en sólo 40 minutos. En coche son 30 minutos por la C-32.