Este fin de semana, Barcelona estará en alerta debido a la llegada de polvo en suspensión proveniente del Sáhara. Este fenómeno, impulsado por una Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA) que se introducirá en la Península Ibérica y alcanzará su concentración máxima el sábado 8 de junio, según la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET).

El polvo en suspensión es una mezcla de partículas finas de arena y minerales que son transportadas por el viento desde el desierto del Sáhara hasta varias zonas de España. Las consecuencias de la llegada de este polvo sahariano pueden ser significativas, especialmente en términos de salud pública y calidad del aire.

La alerta de la AEMET

Según la AEMET, las partículas en suspensión, junto con las altas temperaturas previstas, pueden afectar negativamente la salud, particularmente de las personas más vulnerables, como niños, ancianos y aquellos con enfermedades respiratorias o cardiovasculares.

Barcelona, bajo el polvo del Sáhara

También puede causar irritación en los ojos, la nariz y la garganta, y exacerbar alergias estacionales. Las personas con sensibilidades alérgicas pueden experimentar un aumento en los síntomas. Sin embargo, no debería representar un peligro grave para la población general y tan solo se recomienda no exponerse de forma excesiva a esta calima.

Las concentraciones elevadas de polvo pueden reducir la calidad del aire, provocando cielos turbios y visibilidad reducida, que es precisamente el escenario que se prevé para el próximo sábado, 8 de junio.