Hay canciones que acompañan a una generación, temas que se convierten en himnos con un significado compartido por todos aquellos que la escuchan. Quizá, en parte, sea esa la magia de la música: la capacidad de que cada uno la reciba de forma distinta, y, a la vez, evocar en todos sensaciones similares con significado compartido. En este sentido, Barcelona acogió la grabación del videoclip de la canción más triste de la historia, un sencillo que hizo derramar en su día litros de lágrimas --y todavía lo hace-- en jóvenes y adultos.
Corría el año 2003 cuando la joven banda Evanscence, originaria de Arkansas, voló hasta la capital catalana. Los estadounidenses habían arrancado su trayectoria solo ocho años antes y, a pesar de su ya incipiente éxito con apenas dos EP y un disco demo, lo cierto es que su fama se disparó con su recién presentado Fallen, su primer disco de estudio.
Disparó la carrera de la banda
Los amantes del rock, el rock gótico y el metal alternativo se enamoraron rápidamente de la voz de la cantante, Amy Lee, una de las voces más conocidas del género. Siendo un álbum de rock duro, hubo una canción que rompió con la tónica del disco: My inmortal, un sencillo que versa sobre la despedida, la pérdida de un ser querido, se grabó una semana antes de que uno de los integrantes dejara precipitadamente la banda.
En pocos días alcanzó el puesto 7 de los Billboard's Hot 100, disparando la popularidad de la joven banda.
Una plaza histórica
Pero, ¿dónde se grabó? La banda estableció el centro de su rodaje en nada más y nada menos que la plaza de Sant Felip Neri. Ubicada en el Gòtic de Barcelona, esta plaza es historia viva de la ciudad. De hecho, todavía en las paredes de los edificios que rodean la plaza se pueden ver los agujeros de los disparos y la metralla de las bombas que se lanzaron durante la Guerra Civil española.
Y así, con poco más que un piano, la fuente, un coche escarabajo y unos niños jugando, se rodó una de las canciones que todavía hacen poner la piel de gallina a los amantes del género y a aquella generación que recibió la canción en su niñez, adolescencia y juventud.
Otra localización secreta
Pero el metraje esconde otro secreto, otra localización. A todo el que se fije verá que se grabó en el interior de un edificio. Este inmueble es el modernista Centre Artesà, ubicado en El Prat de Llobregat, aunque se derribó en 2019.
Más allá de estas dos localizaciones centrales, en el vídeo se pueden ver planos rodados por las calles aledañas a los dos espacios, tanto en el barrio del Gòtic de la capital catalana como en el del municipio metropolitano.