Arranca la temporada estival en Barcelona y, con ella, la necesidad de hacer planes pensados para los pequeños de la casa. A diferencia de los adultos, sus vacaciones duran tres meses por lo que siempre va bien hacer pequeñas salidas de unos días pensando en su diversión. Ahí, precisamente, es donde sobresalen los campings, lugares en los que pernoctar, rodeado de naturaleza, llenos de actividades al aire libre. A una hora de Barcelona, uno de estos campings se alza como la opción perfecta para desconectar el fin de semana --o unos días más--.
El Camping Berga Resort, a algo más de una hora en coche de la capital catalana, está equipado con todo lo necesario para hacer las delicias de los niños. No solo es un lugar rodeado de la naturaleza embriagadora que suponen los Pirineos catalanes, sino que supone también una huida del calor de la gran ciudad.
Toboganes, cine y tirolinas
Las instalaciones cuentan incluso con una sala de cine en la que se proyectan películas infantiles todos los días. También con un área de juegos especial para niños, así como unas piscinas con toboganes de estilo de un parque acuático, así como una zona de spa.
Pero como no todo es verlos a ellos jugar, también se pueden hacer rutas de senderismo por la sierra prepirenaica, o disfrutar de las instalaciones deportivas tanto dentro como fuera del recinto. Para las noches, Camping Berga Resort dispone de sala de karaoke.
En este sentido, se pueden encontrar tanto toboganes como columpios, así como también tirolinas rodeadas de uno de los parajes más bellos de la Península Ibérica. Y es que al final, la mayor atracción es poder alejarse del ajetreo diario y respirar aire fresco y puro para recargar las pilas.