A tan solo una hora y media de Barcelona se encuentra una cala turquesa impresionante, un verdadero paraíso escondido al que se puede acceder en barco. Esta cala es un destino perfecto para quienes buscan una escapada tranquila y rodeada de naturaleza. Se trata de la Cala de Aiguablava, en Begur.
El acceso en barco no solo garantiza un viaje pintoresco, sino que también asegura que la cala se mantenga como un rincón poco concurrido, perfecto para disfrutar de sus aguas cristalinas y su arena fina. Este viaje en barco permite disfrutar del paisaje costero, ofreciendo vistas espectaculares del litoral antes de llegar a la cala.
Un paraíso natural en Begur
Una vez en la cala, los visitantes pueden disfrutar de actividades como el snorkel, explorando la vida marina que se esconde bajo sus aguas turquesas. Además, la tranquilidad y el aislamiento de este lugar lo convierten en un sitio ideal para relajarse, tomar el sol y desconectar del ajetreo de la ciudad.
Para los amantes de la naturaleza, la cala también ofrece el Camino de Ronda, que permite explorar el entorno natural de la zona, con vistas panorámicas y la posibilidad de descubrir pequeñas cuevas y formaciones rocosas únicas. Es, sin duda, una joya oculta que ofrece una experiencia inolvidable para aquellos que buscan una conexión más cercana con la naturaleza y el mar.
Ya sea para un día de aventura o para una escapada relajante, esta cala turquesa a hora y media de Barcelona es una opción ideal. El acceso en barco agrega un toque especial a la visita, asegurando que la llegada sea tan memorable como la estancia en este paraje.