Enclavado en el corazón del Parque Natural del Montseny, Viladrau es el pueblo perdido de Barcelona que promete ser un oasis de paz y tranquilidad. A diferencia de lugares más conocidos como Mura o Cardona, Viladrau es un destino poco frecuentado que conserva intacta su esencia rural y natural. Este pequeño pueblo es una joya escondida que invita a los visitantes a desconectar del bullicio urbano y sumergirse en la belleza de su entorno natural.
Viladrau es un lugar que parece sacado de un cuento. Sus calles empedradas, casas tradicionales y rincones floridos ofrecen una atmósfera acogedora y pintoresca. La iglesia de Sant Martí, un edificio gótico del siglo XI, es uno de los principales atractivos históricos del pueblo. Pasear por el casco antiguo de Viladrau es como viajar en el tiempo, con cada rincón contando historias de un pasado lleno de tradición y cultura.
En el corazón del Montseny
Uno de los mayores atractivos de Viladrau es su proximidad al majestuoso Matagalls, una de las montañas más altas del Montseny. Los amantes del senderismo encontrarán en Viladrau el punto de partida perfecto para ascender esta montaña, que ofrece unas vistas panorámicas espectaculares del paisaje circundante. La ruta hacia Matagalls es accesible para todos los niveles de senderistas y proporciona una experiencia inolvidable, rodeada de bosques frondosos y aire puro.
Además de Matagalls, Viladrau es famoso por sus impresionantes saltos de agua. Entre ellos, destaca el Salt de la Minyona, una cascada que, aunque no muy alta, se encuentra en un entorno de gran belleza natural. La caminata hasta la cascada es relativamente corta y atraviesa paisajes de ensueño, lo que la convierte en una excursión ideal para familias y amantes de la naturaleza. La frescura de sus aguas y el sonido relajante del agua cayendo son un bálsamo para los sentidos.
El entorno natural de Viladrau está repleto de caminos y senderos que invitan a explorar bosques de castaños, robles y hayas. En otoño, estos bosques se transforman en un espectáculo de colores, convirtiendo cada paseo en una experiencia mágica. Además, Viladrau es conocido por sus fuentes naturales, con más de 200 manantiales repartidos por todo su territorio, que ofrecen agua fresca y pura.
Cómo llegar a Viladrau desde Barcelona
Para llegar a Viladrau desde Barcelona, hay opciones tanto en transporte público como en coche privado. Si prefieres el transporte público, puedes coger un tren de la línea R3 de Rodalies de Catalunya hasta Vic. Desde Vic, hay autobuses de la compañía Sagalés que te llevarán directamente a Viladrau. El viaje en tren dura aproximadamente una hora y media, y el trayecto en autobús desde Vic es de unos 30 minutos.
Si decides viajar en coche, el trayecto es bastante sencillo. Desde Barcelona, coge la C-17 en dirección a Vic y sigue las indicaciones hacia Viladrau. El viaje en coche dura aproximadamente una hora y cuarto, dependiendo del tráfico.