Poco se podría esperar que cerca de Barcelona existiese el pueblo más pequeño de Catalunya. La capital catalana está rodeada de grandes ciudades densas, como L'Hospitalet o Badalona, aunque si nos alejamos un poco, encontramos pueblos tranquilos donde poder desconectar del ajetreo.
A casi dos horas de Barcelona está Gisclareny, en la comarca del Berguedà, considerado el pueblo con menos habitantes de Catalunya. En concreto, viven 27 personas. También está considerado como una de las villas más bonitas por su entorno natural, ya que forma parte del Parque Natural del Cadí Moixeró, donde se encuentra la majestuosa montaña del Pedraforca.
Senderismo
La Red de Senders Locales de Gisclareny está formada por 10 itinerarios circulares que recorren todo el municipio. Todas las propuestas transcurren por unos paisajes espectaculares y permiten conocer algunos de los lugares más emblemáticos del pueblo. Puedes conocer todas las rutas de senderismo en la página web del Ayuntamiento de Gisclareny.
El paisaje natural de Gisclareny
Lugares de interés
A pesar de ser el pueblo más pequeño de Catalunya, también cuenta con muchos lugares de interés para visitar. Como la Església del Roser, del siglo XVIII, situada en el vecindario de Roser, detrás del edificio del Ayuntamiento; el mirador Albert Arilla, con una magnífica vista sobre Sant Miquel de Turbians y la montaña del Pedraforca; el Molí de Vilella, un antiguo molino hidráulico de cereales que aprovechaba el abundante caudal de una fuente situada cerca del vecindario de Vilella o las Ruïnes de Murcurols, situadas en un lugar rodeado de altas montañas de gran belleza que se elevan más de 1.000 metros por encima de los prados y de los restos del antiguo castillo.
Cómo llegar
Desde Barcelona hay unas dos horas en coche. Se puede llegar a Gisclareny desde la C-16, que pasa por Manresa y Berga, o por la C-59 o C-17, aunque se tarda más en llegar.