En plena temporada veraniega siempre aparece la indecisión de qué pueblos de costa visitar que tengan playas bonitas. Entre Barcelona y Valencia, hay uno en concreto ideal para pasar las vacaciones con aguas cristalinas que recuerdan a Menorca y donde se puede ver tortugas. Se trata de Alcossebre, ubicado en la provincia de Castellón.
Este destino ha cautivado a viajeros con su belleza, encanto y una amplia oferta de actividades. Asimismo, es un pueblo costero muy tranquilo, alejado de las masificaciones turísticas de Tarragona, como Salou o Cambrils.
Playas de Alcossebre
Las playas de Alcossebre son verdaderos paraísos. Desde la Playa de las Fuentes, con sus manantiales de agua dulce emergiendo de la arena, hasta la Playa del Moro, rodeada de acantilados y mucha vegetación dunar, cada rincón ofrece una experiencia inigualable.
La limpieza y seguridad de sus aguas están garantizadas, con la gran mayoría de ellas luciendo la codiciada bandera azul.
Entorno natural
Pero el atractivo de Alcossebre no se limita a sus playas. El entorno natural es excepcional, con el Parque Natural de la Sierra de Irta como protagonista. Senderismo, avistamiento de aves y vistas panorámicas se mezclan en este paraíso natural.
A su vez, los amantes del buceo encontrarán su paraíso en el Parque Natural de las Islas Columbretes, un archipiélago volcánico repleto de vida marina, como tortugas.
Oferta gastronómica
El paseo marítimo de Las Fuentes ofrece una amplia variedad de restaurantes, bares y tiendas donde disfrutar de la gastronomía local y el ambiente veraniego.
Durante la temporada, eventos culturales y festividades llenan las calles de música y alegría, creando un ambiente festivo y acogedor.