Barcelona tiene un plato que odian en el resto de España. Se trata del xató es un plato emblemático que despierta pasiones encontradas. Amado por los locales, este plato tradicional catalán es, sin embargo, objeto de desdén fuera de sus fronteras.
Para entender esta polarización, es crucial explorar sus orígenes, sus ingredientes y el papel cultural que juega en la vida catalana.
Orígenes e ingredientes del xató
El xató tiene una historia que se remonta a siglos atrás. Se dice que el origen del nombre "xató" proviene de la palabra "aixetonar," que en catalán significa "poner el grifo a la barrica de vino." Tradicionalmente, el xató se preparaba durante la fiesta del "xatonada," una celebración que marcaba el momento en que se probaba el primer vino nuevo del año. Esta festividad, especialmente popular en la zona del Penedès, incluye una comida festiva donde el xató es el protagonista.
Un xató en una imagen de archivo
El xató es una ensalada que combina ingredientes frescos y de mar. La base del plato es una mezcla de escarola, una verdura de hoja amarga que aporta un contraste perfecto a los sabores más fuertes de los otros ingredientes. A esta base se le añaden bacalao desalado, anchoas y atún en conserva, que son los componentes marinos esenciales del xató.
Sin embargo, lo que realmente define al xató es su salsa. Esta salsa se elabora con ingredientes que son comunes en la cocina catalana: almendras y avellanas tostadas, ajo, pan frito, ñoras (un tipo de pimiento seco), aceite de oliva, vinagre y sal. Estos ingredientes se mezclan hasta obtener una textura suave y homogénea. La salsa, de un color rojo anaranjado, tiene un sabor intenso y ligeramente picante que impregna toda la ensalada, dándole su carácter distintivo.
La polarización del xató
¿Por qué, entonces, el xató es tan amado en Catalunya y tan despreciado en otros lugares? La respuesta radica en su sabor único y la mezcla de ingredientes que no son del gusto de todos. La escarola, con su sabor amargo, y la combinación de pescado salado y salsa de ñoras, crean una experiencia culinaria que puede resultar demasiado intensa para quienes no están acostumbrados a estos sabores. Además, el uso de ingredientes como las ñoras y el bacalao, que no son comunes en otras partes del mundo, contribuyen a que el xató sea percibido como un plato exótico y, a veces, difícil de apreciar.
Parte integral de la gastronomía catalana
En Barcelona y el resto de Catalunya, el xató no es solo un plato, sino una parte integral de la cultura gastronómica. Las "xatonades" son eventos sociales que reúnen a amigos y familiares para disfrutar de la comida y el vino. Esta tradición refuerza el valor sentimental y cultural del xató para los catalanes.
Fuera de Catalunya, la falta de contexto cultural y la intensidad de los sabores pueden hacer que el xató sea visto con recelo. Sin embargo, para quienes están dispuestos a abrirse a nuevas experiencias culinarias, el xató ofrece una ventana única a la gastronomía catalana.