Barcelona es una provincia con mucha historia. Los pueblos que la forman tienen su propio pasado, que podemos descubrir a través de la arquitectura. En la comarca del Bages, a poco más de una hora de la capital catalana, se encuentra un pequeño municipio medieval con una fortaleza del siglo IX que se alza imponente sobre una colina.
Tiene un encanto especial, que no deja indiferente a aquel que lo visita. Hablamos de Cardona, el pueblo más antiguo de Barcelona.
Castillo medieval: siglo IX
Lo más característico de este pueblo de menos de 5.000 habitantes es su castillo medieval, actualmente reconvertido en un Parador. Construido en el siglo IX, ha sido testigo de importantes eventos históricos. Su origen se remonta a Carlomagno, quien reconquistó el enclave de los musulmanes. Ya en manos de los Cardona, uno de los linajes catalanes más influyentes, fue baluarte militar en numerosos conflictos como las Guerras de Secesión y Sucesión, o la Guerra de la Independencia.
Destaca en su silueta la torre Minyona, de 10 metros de altura y planta cilíndrica. Cuenta la leyenda que los Señores de Cardona encerraron allí a su hija para evitar que se encontrase con su amante, un joven musulmán.
Castillo medieval de Cardona, reconvertido en un Parador
Es considerado uno de los mejores ejemplos de arquitectura militar medieval en España, por lo que pasear por sus murallas y explorar sus torres o patios es una experiencia que te transportará a tiempos de caballeros y reyes. Si te subes a alguna de sus torres, podrás admirar unas panorámicas magníficas de la villa.
Gastronomía catalana
En 1976, el castillo se adaptó para convertirse en un Parador. Hay una leyenda que narra que en la habitación 712 han ocurrido sucesos sobrenaturales. Historias aparte, se trata de un lugar de una belleza excepcional, que cuenta con uno de los mejores restaurantes de gastronomía catalana de la provincia.
En este espacio, que luce espectaculares arcos ojivales de piedra, comerás como un auténtico rey: texturas variadas de bacalao con brandada, escudella, surtidos de embutidos con pan de coca, verduras escalivadas, suquet de mariscos con bogavante, merluza, rape, langostinos y almejas, entre muchos otros platos.
Comedor del restaurante del Parador de Cardona, ubicado en el castillo medieval
Montaña de sal
Otro punto de interés en Cardona es la Montaña de Sal, una formación geológica única que se ha explotado desde tiempos romanos. Sus características naturales la han hecho merecedora de ser incluida dentro del Plan de Espacios de Interés Natural de Catalunya. Es un espacio diapiro que crece cada año, ocupando una superficie de 100 hectáreas.
Galería subterránea de la montaña de sal de Cardona
La visita guiada a las minas de sal es una actividad fascinante que permite conocer la historia de la minería en la región y descubrir las impresionantes galerías subterráneas y esculturas naturales de sal que se han ido formando con el paso de los años.