Barcelona encara un otoño atípico, con un clima particularmente extremo si se compara con los valores que suelen repetirse año tras año. Habitualmente, la capital catalana se caracteriza por temperaturas suaves y un clima húmedo por la influencia del mar, aunque no particularmente lluvioso.
Pero todo eso podría cambiar en las próximas semanas. Y es que el fenómeno de 'La Niña' amenaza con cambiar todos los patrones meteorológicos radicalmente, dejando un clima tan impredecible como, en ocasiones, extremo.
Un otoño extremo
Así las cosas, con la llegada de sus efectos, se esperan unas semanas particularmente lluviosas con drásticos cambios de la temperatura. Con el paso de las semanas, podrían intensificarse sus efectos, dando por resultado lluvias torrenciales.
De la misma manera, se puede pasar de periodos de intenso calor --algo a lo que los barceloneses se han acostumbrado también en el otoño con los últimos años--, a semanas en las que las bajas temperaturas serán la tónica general.
El fenómeno 'La niña'
Pero, ¿qué es 'La Niña'? Se trata de un fenómeno conocido por alterar los patrones habituales de temperatura y precipitación. Este ocurre cuando las aguas del océano Pacífico ecuatorial se enfrían más de lo normal. Este enfriamiento modifica los patrones atmosféricos y afecta el clima en diferentes partes del mundo. Se produce un aumento en la intensidad de los vientos alisios, que soplan de manera regular de este a oeste desde las altas presiones subtropicales hacia las bajas presiones ecuatoriales. Esto provoca un mayor enfriamiento de las aguas superficiales del Pacífico y provoca una serie de cambios en los sistemas climáticos globales.
El fenómeno, en términos generales, suele estar asociado con inviernos más fríos en el hemisferio norte, lluvias intensas en ciertas regiones de Asia y América del Sur y sequías en otras partes del mundo. En Europa, por su parte, sus efectos pueden ser menos predecibles, aunque se han observado patrones de tiempo más frío y húmedo durante su influencia.
Ahora por ahora, todo apunta a un otoño particularmente frío y lluvioso que desemboque, de la misma manera, en un adelanto del invierno, con episodios de nieve en zonas de montaña como Collserola, noches más frescas y fuertes rachas de viento, entre otras.
Los meteorólogos recomiendan estar atentos a las actualizaciones climáticas y a las posibles alertas en las próximas semanas.