Barcelona es una ciudad con una historia rica y milenaria, y a lo largo de los siglos ha sido conocida por muchos nombres, uno de los más perdurables es el de "Ciudad Condal".
Este nombre tiene su origen en el siglo IX, cuando la ciudad formaba parte de una serie de condados bajo el control del Imperio Carolingio. Los condes de Barcelona, figuras clave en la administración y defensa de la región, gobernaban la ciudad y sus alrededores, lo que le valió el título de Ciudad Condal. Se trataba de una auténtica comarca del imperio, además de ser una de las pocas residencias al Califato de Córdoba, creado con el fin de defender a Francia de los musulmanes.
Tierra de condes
En aquella época, el centro de organización de los condados en la región no era otro que Barcelona. La gestión de estos territorios estaba a cargo de Ramón Berenguer, miembro de una de las familias de condes más célebres de la ciudad. Este noble fue quien dirigía y administraba el condado de Barcelona. Bajo su liderazgo, la ciudad se consolidó como la capital de los territorios medievales, adoptando el nombre de Ciudad Condal y heredando el título de su principal gobernante, el conde Ramón Berenguer.