El Saló de Cent del Ayuntamiento de Barcelona se ha llenado durante la tarde de este viernes. Ciudadanos y personalidades de la capital catalana se han congregado para escuchar a la reconocida ilustradora y escritora Carme Solé Vendrell, encargada de pronunciar el pregón de las fiestas de La Mercè de 2024.
Solé ha dedicado su alocución a los niños, protagonistas del cartel de este año, y ha llamado a los habitantes de la capital catalana a recuperar "la mirada del niño", que tiene el poder de, en sus palabras, transformar no solo nuestra percepción del mundo, sino también la manera en que tomamos decisiones y enfrentamos la vida.
La mirada de un niño
Hija del barrio de Horta, en el que se crió, la ilustradora de más de 900 obras ha hecho un emotivo recorrido por su infancia. Ha recordado cómo, pese a la enfermedad y fallecimiento de su madre cuando ella tenía solo nueve años, su hogar ha estado lleno de cariño y alegría. A través de vivencias personales, la artista no solo ha rememorado aquellos años, sino que también ha subrayado la importancia de mantener viva la inocencia y curiosidad propias de la niñez, una etapa que, para ella, encierra la clave para afrontar los retos de la vida adulta.
Señala también Solé que sus miradas son capaces de expresar emociones tan diversas como la alegría, la ternura o la tristeza. "Reencontremos a nuestro propio niño", ha proclamado, haciendo un llamamiento a una ciudad que, a veces, parece haber olvidado la pureza de la mirada infantil, a su parecer.
Abducidos por pantallas
El pregón de Solé no ha estado exento de crítica social. En un momento especialmente relevante, la ilustradora ha denunciado el abuso de las pantallas entre los más jóvenes, un fenómeno que, según ella, priva a los niños de la libertad de jugar, imaginar y compartir. Para Solé, el crecimiento tecnológico ha traído consigo una desconexión emocional preocupante, privando a los niños de experiencias esenciales para su desarrollo.
"Cuando pienso en todos los niños que están abducidos por las pantallas y de cómo se les priva de la libertad de escoger, de compartir, de jugar, de imaginar", ha lamentado Solé, que ha considerado que se trata de una gran falta de respeto y maltrato emocional. Y de ello, precisamente, ha responsabilizado a los adultos, a los que atribuye las "imágenes que los niños reciben".
En un acto simbólico, Solé y tres adolescentes han pintado juntos la palabra "Mercè'24" sobre un lienzo en blanco, utilizando los colores azul, amarillo y rojo. Y, ¿por qué esos colores?, porque son "tres colores con los que se pueden hacer todos los otros", ha analizado en un alegato al respeto de la diversidad de los seres humanos.
En la misma línea, la también escritora ha abogado por la educación en la buena lectura, un hábito que, dice, "les hará libres".
En defensa de los niños
"La mirada de niño es lo más bonito que hay en nosotros y a menudo nos negamos a ver", ha subrayado la ilustradora, que lamentado que haya tantos menores con vidas marcadas por el hambre, la guerra, el maltrato o la esclavitud.
"Si un niño te mira, ¿cómo puedes hacerle daño? ¿Os ha mirado nunca una criatura acabada de nacer? Su mirada es tan profunda que conmueve", ha preguntado, no sin cierta tristeza al recordar guerras actuales en las que hay pequeños sufriendo las consecuencias.
En esta línea, ha instado a que se trabaje para que no haya más llantos y que estos se conviertan en sonrisas, una petición con la que ha culminado su intervención.
Con el pregón, da comienzo de forma oficial las fiestas patronales de la capital catalana. Se trata de cuatro jornadas marcadas por conciertos, actividades, actos y eventos a lo largo y ancho de la ciudad. Las festividades concluirán con el tradicional Piromusical, que tendrá lugar el martes, 24, a las 22:00 horas.