Los escaparates de los comercios han sido y continúan siendo una ventana de expresión para los artistas en Barcelona. Desde el siglo XX, en pleno florecimiento cultural marcado por el Modernismo y el auge del arte de vanguardia, artistas destacados como Ramon Casas, Salvador Dalí, Joan Miró, Joaquim Mir o Xavier Montsalvatge encontraron en estos espacios un medio para exponer sus creaciones y cumplir con los encargos de los comerciantes que querían embellecer sus vitrinas.
En la década de los 60, tiendas emblemáticas como Gales, en el paseo de Gràcia, se convirtieron en escenarios donde Tàpies, Brossa, y otros artistas exhibieron sus obras. Una de ellas fue la de Porta metàl·lica i violí que realizó Tàpies en 1953. Este fenómeno cobró fuerza en el contexto de represión franquista, que restringía el acceso a museos y galerías. De este modo, los artistas hallaron en los escaparates un refugio que les permitió mostrar su trabajo y expresarse con libertad.
'Aparadors Artístics'
Recientemente, en 2022, la publicación cultural Hansel i Gretel, que dirigen Llucià Homs y Fèlix Riera, decidió recuperar e impulsar esta práctica con Aparadors Artístics, una iniciativa donde varios comercios históricos del barrio Gòtic se alían con artistas barceloneses para crear una ruta de escaparates artísticos con el objetivo de generar un diálogo entre comerciantes, artistas y la ciudadanía.
La propuesta celebra su tercera edición este año desde el 27 de septiembre hasta el 27 de octubre, con 35 comercios participantes que contribuirán a dar a conocer el potencial del barrio como centro comercial y artístico de Barcelona.
Up headwear, comercio participante
"Espíritu de L'auca del Senyor Esteve"
En conversación con Metrópoli, Felix Riera, codirector de la publicación cultural Hänsel y Gretel, comenta que la intervención "reinterpreta el espíritu de L'auca del Senyor Esteve". Esta obra, un clásico de la novela y el teatro catalán, escrita por Santiago Rusiñol, ironiza sobre la seriedad de la vocación artística y logra conciliar dos mundos que parecen irreconciliables: "el botiguer sensato, de voluntad de hierro, que abre su negocio cada día y el artista bohemio".
La edición de este año presenta una serie de propuestas artísticas a cargo de reconocidos artistas como Natalia Morales, Núria Farré, Marc Herrero, Perico Pastor, Mónica Rikić y Jan Monclús. Su objetivo es estrechar lazos con diversos comercios participantes, que incluyen chocolaterías, joyerías, sombrererías, centros de artesanía, tiendas de guitarras e incluso de aceite.
Joieria petritxol, otros de los comercios participantes
"Una experiencia de ciudad"
Los artistas buscarán la forma de confluir con los comercios a través de todo tipo de soportes. "La idea es que haya una similitud con el producto de la tienda, una especie de simbiosis", explica Riera. Para ello, utilizarán desde la pintura, escultura, instalaciones específicas, materiales textiles hasta partículas de jabón.
El objetivo es destacar el talento artístico de la zona mientras se impulsa el comercio histórico del barrio, creando una ruta que dinamice la vida urbana. "No es tanto una exposición, sino una experiencia de ciudad", recalca Riera. "Asimismo, genera a los comercios esa relación a abrirse a otros posibles clientes; las obras al final son una manera de sumar atractivo a las vitrinas, atrayendo la mirada curiosa de los transeúntes", añade.
Yellowkorner, comercio participante
Éxito de comercios participantes
Desde su primera edición en 2022, que contó con la participación de 10 establecimientos, el número de comercios involucrados ha crecido de manera exponencial. En 2023, se sumaron 20 locales, y en esta tercera edición ya se han incorporado un total de 35.
Un objetivo que persigue la coordinación del proyecto y parece hacer su efecto. "Nuestra meta es expandir el proyecto cada vez más, darlo a conocer a un público mayor y fortalecer la red entre comerciantes y artistas, convirtiéndolo en una iniciativa cada vez más reconocida", concluyen.