Vuelve una de las discotecas más icónicas de Barcelona, y lo hace como templo del techno. Se trata de La Paloma, que ostenta el título de ser la más antigua de Europa. El local ha regresado a la vida nocturna de la capital catalana. Este legendario club, que abrió sus puertas en 1903 y permaneció cerrado muchos años, ha vuelto a la escena con la intención de retomar su lugar como uno de los principales referentes de la música y el baile en Europa.
Este otoño, la legendaria sala ha preparado una programación que incluye a destacados artistas como Theo Parrish, Egyptian Lover, Hot Chip, Luke Una, Mr. Bongo y Ruby Savage, junto con Glove Party, que también ofrecerá un evento. Las noches de los viernes los liderarán Weval, GAZZI, Softchaos, Chico Blanco y DJ Sweet6teen, entre otras sesiones que correrán a cargo de los grupos locales PPL United, Mainline (Halloween) y ODD CLUB. Desde sus noches temáticas hasta su famoso "tardeo", La Paloma brinda una amplia oferta para los amantes de la música y el baile, con eventos que van desde las 19:30 horas hasta las 02:00 de la mañana. Las entradas están disponibles a través de su sitio web o en Dice.
Más de una década después
El Ayuntamiento dictó el cierre del espacio en 2006 a causa de las quejas vecinales por ruido. Después de 16 años, en 2022, decidieron darle una nueva vida tras insonorizar el local. Aunque a lo largo de 2023 recuperó su actividad paulatinamente, la mítica sala cogerá impulso con la nueva programación de este otoño, recuperando todo su esplendor.
Una joya arquitectónica
Situada entre los barrios de Sant Antoni y El Raval, La Paloma no es simplemente una discoteca, sino una auténtica joya arquitectónica del siglo XX. El local mantiene su impresionante diseño barroco en tonos rojos y dorados, con techos adornados con frescos y grandes candelabros que cuelgan del techo, creando una atmósfera que parece sacada de otra época. Este espacio, que en su época dorada acogía refinados bailes de salón, ha sabido reinventarse sin perder su esencia original. Con capacidad para albergar a 1.000 personas, el interior ha sido restaurado con esmero para conservar su simetría y detalles históricos.
Con más de un siglo de existencia, La Paloma ha sido testigo del paso del tiempo y de generaciones, manteniéndose siempre como un punto de encuentro para personas de diferentes edades y gustos musicales. Lo que comenzó como un espacio para los elegantes bailes de salón, ha evolucionado hasta convertirse en uno de los destinos más icónicos para los amantes de la música.