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Barcelona tiene claro como quiere proyectarse al mundo: como una capital cultural global que atraiga turismo “de calidad”. La clave será la oferta museística tanto pública, con la ampliación del Museu Nacional d’Art de Catalunya (MNAC) y del Museu d'Art Contemporani de Barcelona (MACBA), como privada, que vendrá de la mano del próximo Museo Carmen Thyssen.

Barcelona dice sí a la cultura y a las grandes instituciones culturales, a los equipamientos que nos proyectan como queremos ser en tanto que ciudad cultural, y a los museos públicos y privados”, ha afirmado este jueves, 12 de diciembre, el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, en la presentación del acuerdo entre el fondo inversor Stoneweg y la baronesa Carmen Thyssen para traer el museo a la capital catalana.

Ambición cultural

Collboni ha puesto en valor cómo la ambición cultural ha vuelto a la ciudad y ha dado la bienvenida al futuro Museo Carmen Thyssen de Barcelona, que se ubicará en la “milla del modernismo”.

Abrirá sus puertas en pleno centro, donde antes estaban los antiguos cines Comèdia y que tuvieron que cerrar tras 64 años de trayectoria.

La baronesa Carmen Thyssen (2i), acompañada de su hija Sabina (i), del alcalde de Barcelona, Jaume Collboni y del presidente del grupo inversor Stoneweg, Jaume Sabater (d), durante la rueda de prensa ofrecida este mediodía en el Ayuntamiento de Barcelona EFE/Alejandro García

“Desde el Ayuntamiento teníamos claro que no podíamos perder un espacio cultural tan emblemático”, ha afirmado el alcalde.

Es por eso que el consistorio ha dado todo el apoyo a las partes privadas y ha asegurado que facilitará el aterrizaje del museo.

Turismo cultural “de calidad”

Collboni también ha destacado el tipo de turismo que acudirá al Thyssen: “Tiene que servir para atraer a los visitantes que queremos para Barcelona, un turismo de calidad y cultural”.

La colección de la baronesa, además, dará una oportunidad al arte catalán de darse a conocer internacionalmente, pues el futuro espacio cultural albergará obras catalanas de los siglos XIX y XX.

Cómo será el museo

El espacio cultural acogerá artistas contemporáneos, vanguardistas y clásicos. Según ha detallado Carmen Thyssen, las obras fluirán entre el futuro museo de Barcelona y las colecciones de la baronessa en el MNAC y el espacio de Sant Feliu de Guíxols.

El museo de Barcelona contará con una programación de exposiciones temporales no solamente de arte, sino también de moda, decoración y joyería.

Asimismo, habrá una tienda donde adquirir productos exclusivos del espacio y una oferta gastronómica inspirada en la creatividad y el diseño.

A cargo de una firma catalana

Aparte de las zonas expositivas, el museo Thyssen de Barcelona tendrá espacios inmersivos y hasta un auditorio.

Todo ello, diseñado por un estudio de arquitectura catalán y otro internacional.

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Apertura en 2027

El presidente y CEO del fondo Stoneweg, Jaume Sabater, ha aclarado que todavía se trata de un “proyecto prematuro” y ha apuntado que debería estar operativo en 2027.

Aun así, según ha explicado, todavía están en proceso de adquirir la licencia y las obras en el edificio serán importantes. A este hecho se le complica que el edificio comprado que albergará el Museo Thyssen hay una tienda de Massimo Dutti que se niega a ceder el local antes de que termine su contrato de arrendamiento.

En este sentido, Sabater ha expresado su predisposición a llegar a un acuerdo y no ha querido precisar cuánto dinero costará la inversión, aunque algunas informaciones apuntan a que el importe total de la compra asciende a 75 millones de euros y las reformas costarán otros 35 millones.