Barcelona ha vivido una semana marcada por las temperaturas agradables y el viento. Ahora que llega el fin de semana, son muchos los que se preguntan qué pasará en la capital catalana en los próximos días.
Para mañana, sábado, se impondrá la inestabilidad debido al paso de un frente que dejará los cielos bastante nublados en la ciudad.
Habrá probabilidad de precipitaciones débiles y de carácter irregular, que podrían alargarse hasta la noche y madrugada del sábado al domingo.
De cara al domingo, se prevé que tengamos una jornada mayormente soleada con algunos intervalos nubosos. Sin embargo, la temperatura máxima quedará frenada, marcando el inicio de una tendencia de temperaturas a la baja.
Panorámica de Barcelona en un día soleado
Previsión para la semana
Durante la primera mitad de la semana que viene se mantendría esta evolución del mercurio, con noches frías y registros diurnos más frescos que los que hemos tenido estos últimos días.
Será necesario abrigarse durante las primeras horas del día porque las mínimas se podrían situar entre los 5 y los 7 °C.
Pasada esa primera mitad de semana, se espera una recuperación de los termómetros, una ausencia de precipitaciones y la vuelta a un ambiente más propio de inicios de primavera que del mes de enero.
Dos mujeres pasean por la calle muy abrigadas en plena ola de frío en Barcelona
La curiosidad meteorológica
En este caso hablaremos de la inversión térmica, un concepto que dejó una llamativa diferencia de temperaturas entre los puntos altos de la ciudad (habitualmente los más fríos) y los lugares más céntricos de la capital (por norma general, los más cálidos).
Y es que el pasado 29 de diciembre, Barcelona experimentó un fenómeno orográfico y atmosférico, la inversión térmica.
Es ciertamente habitual en inviernos como el que estamos teniendo, aunque destacado por la excepcionalidad de sus registros. La inversión térmica del día 29 dejó temperaturas notablemente dispares en la ciudad, con 10 °C registrados en el Tibidabo y solo 1 °C en Trinitat Nova. Pero, ¿cómo es esto posible?
Vista de la iglesia de Sant Genís dels Agudells, con el Tibidabo al fondo / INMA SANTOS
¿Cuándo ocurre la inversión térmica?
La inversión térmica ocurre cuando una capa de aire cálido queda atrapada por encima de otra más fría, algo típico en noches despejadas y sin viento bajo condiciones de alta presión.
En este caso, las zonas bajas, como Trinitat Nova, se enfriaron intensamente, mientras que áreas más altas, como el Tibidabo, quedaron al margen del aire frío, registrando temperaturas bastante más suaves.
Sin embargo, la temperatura en este barrio del distrito noubarrienc fue excepcional; en cambio, Trinitat Nova no es, ni mucho menos, la zona más baja de la ciudad. Entonces, ¿qué otros factores intervienen?
Principalmente, dos. El primero es su localización: Trinitat es un barrio alejado del centro neurálgico de la ciudad, lejos de la cúpula de calor y de la contaminación, y cercano, al mismo tiempo, a la Serra de Collserola, por donde desciende el frío de las capas altas.
El segundo factor tiene que ver con su cercanía al río Besòs, que canaliza el aire gélido almacenado en el Vallès, y barrios cercanos a este tobogán orográfico se ven afectados por el frío.