Barcelona sigue consolidándose como un destino gastronómico de primer nivel, y no solo entre turistas internacionales, sino también entre figuras de talla mundial.
La reciente visita de Barack Obama, Bruce Springsteen y Steven Spielberg al restaurante Amar Barcelona, ubicado en el histórico Hotel El Palace, ha causado revuelo tanto en el sector gastronómico como entre los ciudadanos.
La sorpresa no fue solo la elección del lugar, sino también el entusiasmo del expresidente estadounidense, que, según fuentes del restaurante, “lo probó todo”.
Una cena de alto perfil en el corazón
La noche previa al concierto de Springsteen en el Estadi Olímpic, el grupo de celebridades llegó a Amar, restaurante dirigido por el prestigioso chef Rafa Zafra, conocido por su exquisita cocina basada en productos del mar y por haber trabajado con los hermanos Adrià.
Barack Obama en una imagen de archivo
La llegada del grupo se produjo pasada la medianoche, obligando al restaurante a extender su servicio de cocina especialmente para sus distinguidos comensales.
El dispositivo de seguridad fue notable, aunque el acceso de los invitados se hizo de forma escalonada y discreta. Tanto Barack y Michelle Obama, como los demás asistentes, llegaron en vehículos separados para mantener la privacidad de la velada.
Amar Barcelona: lujo, mar y producto
Amar, que abrió sus puertas en 2022 dentro del Hotel El Palace Barcelona, es ya uno de los templos gastronómicos más destacados de la ciudad. El local refleja la pasión de Zafra por el mar y el producto de temporada, con una carta que combina tradición mediterránea y lujo moderno.
Según su filosofía, el restaurante busca “casualización el lujo”, ofreciendo alta cocina en un entorno sofisticado pero accesible.
El chef Rafa Zafra de Amar Barcelona
Entre sus platos estrella se encuentran las ostras en homenaje a Albert Adrià, el trikini de bogavante, salmón ahumado y caviar, o la langosta beurre blanc, todos ellos presentes en la mesa de Obama y compañía, según fuentes cercanas al establecimiento. “No dejaron nada por probar, fue una degustación completa”, afirma un miembro del equipo del restaurante.
Un impulso turístico y mediático para la ciudad
La visita de estas figuras internacionales no solo supone un impulso para la reputación de Amar, sino que también posiciona a Barcelona como un destino top para el turismo de alto nivel y la gastronomía de autor.
Un plato del restaurante Amar de Barcelona en una imagen de archivo
La combinación de arte, mar, historia y cocina convierte a la ciudad en parada obligada para personalidades de todo el mundo.