En el corazón de la Barcelona de los años 30 existió una auténtica maravilla de la natación y el ocio: la piscina más grande del mundo. Situada en la concurrida calle Doctor Fleming, junto al antiguo campo del Espanyol en Sarrià, el complejo Piscinas & Sports se inauguró el 24 de julio de 1935 y se convirtió en un icono para generaciones de barceloneses. Hoy, en el mismo lugar, se levanta un moderno gimnasio de la cadena DiR, pero su historia sigue viva en la memoria de la ciudad.
La piscina más grande del mundo estaba en Barcelona
Con unas dimensiones que en su época resultaban casi inimaginables, la conocida como piscina Mercè no solo fue la más grande de Barcelona, sino que ostentó durante años el título de la piscina más grande del planeta. Era un auténtico refugio de frescura en pleno verano y un punto de encuentro social donde se mezclaban deporte, ocio y vida cultural.
Durante décadas, el complejo fue escenario de competiciones de natación, eventos sociales y fiestas, convirtiéndose en uno de los lugares más vibrantes de la ciudad. Miles de barceloneses se sumergieron en sus aguas, creando recuerdos imborrables en un espacio que combinaba deporte y glamour.
Un complejo deportivo adelantado a su tiempo
El Piscinas & Sports no era solo una piscina. Sus instalaciones incluían un puente de cemento, tres trampolines, una escuela de natación y un gimnasio cubierto. Pero la oferta de ocio iba mucho más allá: contaba con pista de patinaje, pistas de tenis, campo de golf, campo de béisbol y hasta una sala de baile y conciertos.
Complejo Piscinas & Sports en 1935 / HISTÒRIES DE BARCELONA
El bar-restaurante del complejo estaba gestionado nada menos que por el prestigioso Hotel Ritz, lo que convertía al lugar en un espacio sofisticado y con una oferta gastronómica de primer nivel. En su época dorada, era común ver a familias enteras pasar el día entero allí, combinando deporte, descanso y vida social.
De centro deportivo a espacio histórico
La Guerra Civil alteró por completo su destino. Durante el conflicto, las instalaciones fueron utilizadas como centro de reclutamiento de jóvenes republicanos. Tras la contienda, la dictadura franquista devolvió al lugar su función deportiva, rebautizándolo con el nombre españolizado de Piscinas y Deportes.
Usuarios en la piscina del DIR Diagonal, la pasada primavera / EFE
Con el paso del tiempo, la ciudad y sus necesidades cambiaron. A mediados de los 80, el complejo comenzó a perder protagonismo frente a nuevas instalaciones deportivas y otros espacios de ocio. Finalmente, en 1986, la histórica piscina cerró sus puertas.
De piscinas a gimnasio DiR
Hoy, donde una vez se alzó la piscina más grande del mundo, se encuentra un moderno gimnasio de la cadena DiR, símbolo de cómo la ciudad ha sabido transformar su espacio sin olvidar su historia. Aunque la estructura física ya no existe, para muchos barceloneses sigue vivo el recuerdo de aquellos veranos en los que la piscina Mercè era el epicentro del ocio en Barcelona.
Un recuerdo imborrable en la memoria de Barcelona
Para quienes vivieron su época dorada, la piscina de Doctor Fleming no era solo un lugar para nadar, sino un punto de encuentro, un espacio de comunidad y una parte esencial de la vida social de la ciudad. Aunque hoy sus aguas se hayan evaporado y sus instalaciones se hayan transformado, su espíritu perdura en la memoria colectiva.