Publicada

Barcelona ha amanecido este miércoles, 17 de septiembre, con una jornada marcada por la intensa movilidad y un tráfico complicado en los principales accesos a la ciudad.

En el ámbito meteorológico, la ciudad vivirá este miércoles una jornada con nubes altas desde primera hora, que darán paso por la tarde a un cielo poco nuboso, según la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET).

Las temperaturas se mantendrán estables, con una máxima de 28 grados y una mínima de 21, alcanzando una sensación térmica de 29 grados

Estación de Rodalies de Castelldefels Rodalies

Transporte público

El transporte público, tanto metro, autobuses, tranvía, Rodalies y Ferrocarrils, funciona con normalidad hasta el momento, lo que lo convierte en una alternativa recomendable para evitar las largas colas de vehículos en carretera.

Los usuarios de Rodalies deben recordar que el lunes empezaron los cortes en la R4, con cambios de horarios y los trenes no circularán en sentido sur. 

Imagen de archivo de tráfico en una de las principales vías de Barcelona Transit

Tráfico

Esta mañana del 17 de septiembre de 2025, la circulación en el área metropolitana de Barcelona presenta varias incidencias destacadas.

En la A-2, se registran 8,5 km de retenciones en sentido este, entre Sant Joan Despí y Pallejà, en dirección a Barcelona (07:02 h).

La B-10 también concentra complicaciones: en sentido norte, hay 3 km de circulación intensa entre Santa Coloma de Gramenet y Sant Adrià de Besòs, a la altura del Nus de la Trinitat  En sentido sur, se acumulan 4 km de retenciones entre Barcelona y el Nus del Llobregat.

En la B-20, se registran 5 km de congestión en sentido sur, en dirección al Nus del Llobregat.

Tráfico en la provincia de Barcelona X (transit)

Por su parte, la C-32 presenta 3,5 km de retenciones en sentido norte, entre Sant Boi de Llobregat y Viladecans, en dirección a Barcelona (07:00 h).

Finalmente, en la C-33, se observan 2 km de circulación lenta en sentido sur, en el tramo entre Montcada i Reixac y Barcelona.

La jornada arranca, por tanto, con atascos generalizados en los principales accesos a la capital catalana, lo que puede alargar los tiempos de desplazamiento durante las primeras horas del día.